MADRID, 18 May. (EUROPA PRESS) -
Casi 50.000 personas han contraído el nuevo coronavirus en México, país que suma ya más de 5.000 fallecidos y que encara este lunes el reinicio de las actividades en más de 300 'municipios de la esperanza' con una transmisión del virus baja o incluso nula.
El viceministro de Salud, Hugo López-Gatell, ha informado de 2.075 casos nuevos de coronavirus, lo que eleva el balance provisional hasta los 49.219. Al menos 5.177 personas han fallecido víctimas de la COVID-19, la enfermedad derivada de esta pandemia, 132 más que el sábado.
La Ciudad de México y los estados de Tabasco, Morelos y Yucatán son las zonas con mayor incidencia de casos activos, mientras que en más de 300 municipios está previsto que se reanuden este lunes las actividades dentro de la bautizada como "nueva normalidad".
López-Gatell ha advertido de que la lista es "cambiante" y depende de que el riesgo en estas áreas siga siendo bajo. En este sentido, ha citado el caso de Copala, en Veracruz, que tras registrar este domingo un nuevo positivo no podrá retomar las actividades este lunes como estaba previsto, según medios locales.
Hasta el 30 de mayo no está previsto a nivel nacional el levantamiento de la Jornada Nacional de Sana Distancia, por lo que el viceministro ha recordado que los estados están obligados a acatar hasta entonces las órdenes que dicte el Gobierno federal. Las regiones sí podrían endurecer las medidas, pero no autorizar la reanudación de actividades vetadas a nivel nacional.
VIGILANCIA A EMPRESAS
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ha apelado a la cautela en los 'municipios de la esperanza' y ha reconocido que, aunque la salud es la prioridad, también hay que ir "pensando en abrir". "Tenemos que reiniciar en cabalidad la vida productiva, la vida económica, la vida social, la vida cultural de nuestro país, el regreso la nueva normalidad", ha afirmado en un vídeo.
De cara a la reactivación de empresas, el mandatario ha prometido que no habrá "muchos mecanismos de supervisión o trámites burocráticos", sino que se optará por la "confianza". Sí ha advertido, no obstante, de que "por sorteo" se realizarán inspecciones para vigilar que las empresas cumplen y que, en caso de que se detecten violaciones, se tomarán medidas.