MADRID, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Togo, Faure Gnassingbé, ha decretado la "emergencia sanitaria" en todo el país durante un periodo de tres meses a partir de este jueves y ha impuesto el toque de queda nocturno en Lomé, la capital, en el marco de las medidas para frenar la propagación del coronavirus.
En un mensaje a la nación a última hora del miércoles, el mandatario ha pedido "disciplina y responsabilidad" a los ciudadanos y les ha informado de que, "teniendo en cuenta la gravedad de la situación", ha decidido decretar el estado de emergencia sanitaria durante tres meses.
Además en Lomé entrará en vigor desde este jueves un toque de queda entre las 19.00 y las 6.00 horas que, según ha puntualizado el ministro de Seguridad, "podría extenderse de ser necesario" a todo el país, que registró su primer caso de Covid-19 el pasado 6 de marzo.
"La pandemia de coronavirus nos impone desafíos excepcionales, inmensos sacrificios. Llama a adoptar medidas nuevas y disposiciones valientes para proteger" a la población, ha defendido. Según ha indicado, el Gobierno ha obtenido de la Asamblea Nacional autorización para poder adoptar vía decreto todas las medidas necesarias frente al coronavirus durante los próximos seis meses.
Gnassingbé ha anunciado que una fuerza especial de 5.000 efectivos se encargará de velar por el cumplimiento de las medidas adoptadas con el fin de "ganar la batalla" contra la pandemia. Asimismo, el presidente ha informado de la creación de un "fondo de solidaridad nacional y de recuperación económica de 400.000 millones de francos CFA" (unos 609,8 millones de euros).
Por el momento, en Togo se han registrado un total de 36 casos y dos muertos, mientras que diez pacientes han superado ya la enfermedad Covid-19. El país atraviesa también una crisis política tras las elecciones presidenciales del pasado 22 de febrero en las que Gnassingbé obtuvo su cuarto mandato y cuyo resultado no reconoce el segundo clasificado, Agbéyomé Kodjo, que reivindica ser el "presidente democráticamente electo".