Actualizado 22/07/2006 01:34

Crónica Mercosur.- Los jefes del bloque ratifican su intención de crear un banco de desarrollo y un gasoducto común

La Cumbre de Mercosur a la que asistió Fidel Castro culmina con la firma de un acuerdo con Cuba que desafía el bloqueo de EEUU


BUENOS AIRES, 21 Jul. (Del corresponsal de EUROPA PRESS Rafael Saralegui) -

Los presidentes que asistieron a la XXX Cumbre de Presidentes del Mercosur y estados asociados acordaron nuevamente impulsar la integración política, financiera y energética de la región tras las deliberaciones que llevaron adelante hoy en la ciudad de Córdoba, sede del encuentro, situada a 800 kilómetros de Buenos Aires.

Rodeado por los presidentes de Brasil, Luis Ignacio 'Lula' da Silva; de Paraguay, Nicanor Duarte Frutos; de Uruguay, Tabaré Vázquez; de Chile, Michele Bachelet; de Venezuela, Hugo Chávez; de Bolivia, Evo Morales, y de Cuba, Fidel Castro, el presidente argentino, Néstor Kirchner ratificó en su discurso de apertura la intención de avanzar en la creación de un banco de desarrollo regional, "que nos permita contar --dijo-- con medios financieros para concretar" los planes productivos de Mercosur.

Así, en la declaración que los mandatarios firmaron después las deliberaciones, ratificaron la intención de crear un banco de desarrollo sudamericano, como pidió Kirchner en la apertura de las discusiones, para financiar obras en la región y la creación de un gasoducto regional que se extienda desde Venezuela hasta Argentina.

La cumbre de presidentes tuvo significación política porque fue la primera reunión a la que asistió Venezuela como miembro pleno del bloque integrado por Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay y porque además Kirchner entregó a su colega 'Lula' da Silva la presidencia temporal de Mercosur.

En su discurso, 'Lula' dijo que no cree que Brasil y Argentina hayan tenido nunca "la relación que tienen ahora, de comprensión del rol de cada uno, de respeto mutuo por nuestras realidades, de los problemas políticos que tenemos". "Solamente con esta comprensión podremos conducir al Mercosur", sentenció.

El mandatario brasileño, principal sostén del Mercosur junto con Kirchner frente a las críticas de los miembros más pequeños, pidió que "en poco tiempo" se pueda ampliar el Mercosur, "desde México hasta la Patagonia, pasando por el Caribe y trayendo a Cuba también".

ACUERDO CON CUBA

Los integrantes del Mercosur firmaron un convenio comercial con Cuba, lo que significó un gesto político de desafío al bloqueo comercial impuesto por Estados Unidos al Gobierno de la isla, a pesar de que el acuerdo no tiene una gran relevancia desde un punto de vista económico, ya que la mayoría de los países habían firmado previamente convenios bilaterales con Cuba.

Más allá de las deliberaciones, la cumbre fue importante por los encuentros bilaterales que mantuvieron los diferentes presidentes. Por ejemplo, Kirchner se reunió en privado con Bachelet y con Vázquez. El encuentro con el presidente Uruguayo fue la primera reunión privada que mantienen desde marzo, después de que estallara el conflicto entre los dos países por la instalación de plantas de celulosa en la ciudad uruguaya de Fray Bentos.

Kirchner no se refirió al diferendo con Uruguay en su discurso de apertura, algo que si hizo Vázquez, quien dijo que se iba "contento" de la cumbre porque había acordado con Kirchner volver a reunirse. "Lo hablamos con el presidente, no puede ser que entre hermanos resuelvan terceros", destacó el mandatario uruguayo, quien aseguró que el Río Uruguay, cuya soberanía comparten ambos países, "nos debe unir y no separar".

BACHELET PIDE CUMPLIR COMPROMISOS

La presidenta Bachelet abogó hoy por mantener la confianza entre los países de la región, al hacer un llamamiento a la unidad de los países que integran el Mercado Común del Sur.

Estas palabras fueron interpretadas como un llamamiento de atención a Argentina, para que cumpla los compromisos adquiridos en el pasado respecto de la venta de gas natural boliviano a Chile, tema que mantiene cierta tensión en las relaciones entre ambos países.

"La integración no son sólo ideas y no se puede basar sólo en la retórica, la integración es un proceso entre nuestros gobiernos y nuestros pueblos que parte por crear un cierto sentido de pertenencia común para ello la generación de confianzas es crucial, tan importante como conseguir las confianzas es mantenerlas", indicó.

"De ahí la importancia de que una vez logrados los acuerdos, perseveremos en ellos para que los procesos de integración fructifiquen, más importante que conseguir textos luego de arduas negociaciones es cumplirlos dentro del ánimo de pertenencia colectiva", agregó la médico socialista, que inició su gobierno el pasado 11 de marzo.

La presencia de Castro también fue uno de los platos fuertes de la Cumbre. Fue confirmada ayer en el último momento por el ministro argentino de Asuntos Exteriores, Jorge Taiana, y levantó gran expectación entre los periodistas que cubren el encuentro.

CUBA, "SIN DESAPARECIDOS NI TORTURADOS"

Castro pronunció un discurso de poco más de una hora en la apertura de las deliberaciones de la Cumbre en el que aseguró que la integración regional tiene "enemigos" desde hace siglos que "no son felices cuando escuchan noticias de esta reunión".

Al referirse a su misteriosa llegada, bromeó diciendo que "ni él mismo sabía que venía" y que esta "es la única reunión en que no hicieron un par de atentados en mi contra". Además en su discurso el líder cubano señaló que tiene más libertad para hablar por haber "sobrevivido a más de 600 planes" para asesinarlo.

Llamó a superar los obstáculos a la integración y destacó "la importancia que le dieron a esta reunión" desde norteamérica, "cuando hace unos meses decían que este mercado estaba en crisis y que no podían superarse los conflictos entre Argentina y Brasil".

Por otra parte, Castro aprovechó la ocasión para asegurar que en Cuba "no ha habido jamás un desaparecido ni un torturado". Sin embargo, no hizo referencia a los cerca de 72 presos de conciencia confirmados en la isla por Amnistía Internacional (AI) en su último informe, donde precisa que 62 de ellos "fueron encarcelados durante la represión de marzo de 2003", durante la que se fusilaron a tres personas tras un juicio sumario.

Desde Damas de Blanco, colectivo formado por las esposas de los 75 disidentes cubanos encarcelados en la Primavera Negra de 2003, se calcula que las cárceles del país caribeño retienen a "unos 300 prisioneros políticos pacíficos" que "deben ser liberados".

Además en su intervención, Castro abordó el tema de la coca boliviana, al sugerir que tal vez el café "es más dañino que el té de coca" y bromeó con una promesa del presidente de Bolivia. "Prohibirle la coca a Bolivia es como prohibirle el café a los norteamericanos", afirmó. Según Fidel Castro, para su 80 cumpleaños, que celebrará el próximo 13 de agosto, Evo Morales le mandará "un pastel de coca".

Mientras tanto en el marco de la Cumbre, el ministro argentino de Exteriores entregó una carta a su homólogo cubano, Felipe Pérez Roque, en la que el Gobierno argentino se refiere a la situación de la médico Hilda Molina, a quien no se le permite salir de Cuba para viajar a Argentina y visitar a su familia. En la carta, Kirchner le solicita a Castro considerar la posibilidad de que Molina pueda reunirse con su gente.

Pérez Roque dijo a Taiana que Fidel "iba a analizar la carta y le iba a responder" a la petición del presidente argentino.

Pese a que la mayoría de los mandatarios se fueron de Córdoba tras el cierre de las discusiones, Morales, Chávez y Castro se quedaron en esa ciudad del centro del país para líder una "cumbre de los pueblos" similar a la que se realizó en Mar del Plata el año pasado.