Actualizado 28/02/2011 19:49

Cuba.- Concluyen los debates en Cuba sobre las reformas económicas y sociales

Jóvenes leyendo el proyecto sobre las reformas económicas en Cuba.
EP/JUVENTUD REBELDE


MADRID, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -

Los debates sobre el paquete de reformas económicas y sociales en Cuba culminarán este lunes de acuerdo al calendario establecido para el período de consultas en el que han participado miles de personas de todas las ciudades de esa nación caribeña.

El proceso de consultas comenzó el pasado 1 de diciembre y en apenas un mes se habían celebrado más de 55.000 debates, es decir, la tercera parte de los encuentros que tenían previsto realizar, según cifras divulgadas entonces por medios oficiales.

A estas reuniones han asistido las organizaciones de base del gobernante Partido Comunista de Cuba (PCC), miembros de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), trabajadores, vecinos y estudiantes, para hablar sobre el proyecto que introducirá cambios inéditos en la isla en materia social y económica.

Las propuestas presentadas serán debatidas entre los próximos 16 y 19 de abril por el gobernante Partido Comunista de Cuba (PCC) que se reunirá por primera vez en 13 años para debatir este proyecto histórico.

El ex mandatario Fidel Castro encabezará junto a su hermano, el actual presidente, Raúl Castro, el VI Congreso del PCC tras haber sido elegidos de manera unánime como delegados de la provincia de Santiago de Cuba (oeste).

Fidel Castro, de 84 años, se apartó del poder en 2006 tras haber sido sometido a una operación gastrointestinal que le dejó secuelas, pero continúa siendo el primer secretario del Comité Central del Partido Comunista, mientras que Raúl Castro es el segundo secretario de la organización.

El Proyecto de Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución contiene 291 medidas orientadas a potenciar el sector privado, reducir todos los subsidios, buscar alternativas de financiación, reactivar el aparato productivo, promover la inversión extranjera y reubicar en trabajos privados a unos 500.000 empleados públicos que comenzaron a ser despedidos en enero.

El presidente cubano, Raúl Castro, ha dicho que estas reformas son "inaplazables" para garantizar la supervivencia del sistema socialista instaurado con la revolución de 1959. No obstante, la población observa el cambio con escepticismo ante el temor de que sea ella quien soporte el coste de esta transformación.

Con estas medidas, Cuba intentará superar la crisis económica que achaca, entre otras cosas, a los 50 años de bloqueo impuesto por Estados Unidos y a los más de 20.000 millones de dólares (14.700 millones de euros) en pérdidas que han dejado los 16 huracanes que han azotado la isla desde 1998.

Para el Gobierno de Castro este proyecto no implica una reforma económica y social y de su sistema, sino la "actualización" del modelo socialista que impera en la isla desde hace 52 años con el triunfo de la revolución.

CAMBIOS EN CURSO

Aunque el proyecto no ha sido oficialmente aprobado, el Gobierno de Castro ha puesto en marcha algunos cambios trascendentales para la vida cotidiana de los cubanos, como la eliminación de los subsidios de una buena parte de los alimentos de la llamada libreta de racionamiento.

El propio Raúl Castro ha pedido aliviar al Estado de algunas cargas que ha considerado innecesarias y ha hecho un llamamiento a los cubanos a "apretarse el cinturón" en estos momentos de crisis. En la isla el salario no supera los 20 pesos convertibles cubanos, es decir, unos 16 euros, y conseguir algunos productos es una tarea titánica en medio los problemas de abastecimiento derivados, en parte, por el bloqueo económico estadounidense.

Otra de las medidas que podría tener un gran impacto en la economía de la isla es el despido de unos 500.000 empleados públicos, proceso que comenzó el pasado enero y que se extenderá dos años. La idea del régimen castrista es reubicar a estos parados en las pequeñas empresas privadas que podrán ahora crear los cubanos.

Más de 85.000 personas han solicitado la licencia ante la Oficina Nacional de Administración Tributaria de Cuba (ONAT) para ejercer en una de las 178 actividades autorizadas por el Gobierno. Desde octubre de 2010 hasta primeros de enero de este años habían sido concedidos más de 75.000 permisos para trabajos por cuenta propia.

Según datos del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, el 68 por ciento de los cubanos autorizados para el trabajo por cuenta propia estaban desempleados, mientras que el 16 por ciento eran trabajadores y el quince por ciento jubilados. También hay que sumar las 56.698 personas "con vistas a afiliarse al régimen especial de seguridad social".

Entre las actividades más demandadas por los cubanos está la elaboración y venta de alimentos (como la creación de restaurantes y cafeterías), con un 22 por ciento de los permisos concedidos. También figura la contratación de empleados de manera particular, que abarca el 16 por ciento.