QUITO, 22 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, admitió este miércoles que el sistema político en Cuba requiere introducir "cambios" y recordó que el ex presidente cubano Fidel Castro "ha dicho que el modelo cubano es irrepetible".
A pesar de elogiar "la dignidad del pueblo cubano, su espíritu de resistencia" y los logros "extraordinarios" del régimen en materia social, el presidente ecuatoriano reconoció creer que "debe haber cambios en el sistema político" cubano en una entrevista al programa 'Palabra Suelta' de EcuadorTV.
"Pero yo no seré el que le diga eso al pueblo cubano, serán los propios cubanos los que resuelvan sus problemas", explicó el mandatario. "El propio Raúl está pensando en eso", aseguró, en alusión al presidente, Raúl Castro.
Correa advirtió de que no se puede juzgar los logros ni la situación de Cuba sin tener en cuenta el embargo impuesto por Estados Unidos a la isla desde hace casi 50 años.
"No se puede juzgar la situación de Cuba o el éxito o fracaso de un sistema sin considerar 50 años de embargo. Nosotros no resistimos ni cinco meses si Estados Unidos nos embarga", admitió. "Desconocer ese factor fundamental es de una deshonestidad intelectual tremenda", concluyó.
Al ser preguntado por la figura del presidente estadounidense, Barack Obama, Correa admitió que su victoria en las urnas "parece (una) película" y consideró que la elección del primer presidente negro supone toda una "lección de democracia" que trae esperanza a las minorías.
Por otra parte, aseguró que el presidente venezolano, Hugo Chávez, es "la persona más auténtica, sincera y solidaria" y criticó que la oposición venezolana lo tilde de "el dictador" y "el asesino" cuando "al único que intentaron asesinar fue al propio Chávez durante el golpe de Estado del 2002, con el aplauso de los embajadores estadounidense y español, dicho sea de paso". "Como no es de la argolla lo tratan de estigmatizar", consideró, al ser preguntado también por Chávez.
SOCIALISMO DEL SIGLO XXI
Preguntado por cómo debe ser el modelo de socialismo en el siglo XXI, Correa defendió que éste "siempre" se caracterice por la existencia de libertad, al tiempo que consideró "conveniente" contar con un Estado fuerte y lamentó "la crisis de pensamiento" que, a su juicio, hubo en el continente latinoamericano hace años.
En este sentido, la nueva Constitución ecuatoriana servirá, dijo, para "rescatar el rol del Estado, la planificación, el rol de la sociedad", algo que, garantizó, también tendrá incidencia a la hora de superar la crisis financiera.