Actualizado 13/09/2012 14:15

Cuba/EEUU.- La mujer de Gross dice que la salud de su marido se ha deteriorado en prisión pero La Habana lo niega


LA HABANA, 13 Sep. (Reuters/EP) -

La mujer del contratista estadounidense Alan Gross, que cumple una pena de 15 años de cárcel en Cuba, ha asegurado esta semana que el estado de salud de su marido se ha deteriorado seriamente en prisión, pero el Gobierno cubano se ha apresudaro a negar este extremo y se ha ofrecido a "dialogar" con Estados Unidos sobre el caso.

Gross fue detenido en La Habana en diciembre de 2009 y sentenciado en marzo de 2011 a 15 años de cárcel por introducir ilegalmente equipos de internet en la isla y crear redes de Wi-Fi bajo un controvertido programa de Estados Unidos.

Su esposa Judy dijo el martes en un comunicado que había visitado a Gross en La Habana y lo encontró muy deteriorado de salud. "Acabo de regresar de visitar a Alan en Cuba y me sentí desolada frente a su apariencia", explicó. "Si bien su espíritu se mantiene fuerte, temo que no sobrevivirá esta terrible experiencia", agregó.

Según la mujer, Gross, de 63 años, ha perdido unos 48 kilos y ha desarrollado una artritis degenerativa y una "masa" detrás de su omóplato derecho.

El Gobierno cubano emitió este miércoles otro comunicado para negar estas informaciones. "El estado de salud del señor Gross sigue siendo normal y realiza regularmente intensos ejercicios físicos", ha explicado la responsable de las cuestiones relativas a Estados Unidos dentro del Ministerio de Exteriores cubano, Josefina Vidal. Según Vidal, Judy Gross visitó en tres ocasiones a su marido la semana pasada y "las mejores condiciones fueron creadas" para las reuniones.

Washington sostiene que Gross sólo estaba intentando ayudar a configurar conexiones de internet para la comunidad judía de Cuba, pero La Habana consideró sus acciones como parte de una campaña que Estados Unidos lleva a cabo desde hace mucho tiempo para derrocar al sistema comunista de la isla.

El arresto de Gross puso fin a un leve deshielo en las relaciones entre Washington y La Habana bajo la presidencia de Barack Obama, quien había flexibilizado algunos puntos del embargo comercial de más de 50 años contra la isla al permitir que los cubano estadounidenses puedan viajar libremente y enviar remesas a su país.

Las autoridades cubanas han sugerido previamente que los dos países podrían hacer un intercambio de prisioneros. La excarcelación de Gross por cuatro agentes cubanos presos en Estados Unidos bajo cargos de espionaje.

El martes se cumplieron 14 años del arresto y encarcelamiento de los agentes que el Gobierno de La Habana considera que han sido tratados injustamente, en un tema que se ha convertido en una causa nacional.

WASHINGTON RECHAZA CANJE DE PRISIONEROS

Originalmente había cinco agentes cubanos en cárceles de Estados Unidos, pero uno de ellos completó su condena de 13 años de prisión y fue puesto en libertad condicional bajo palabra. Un juez estadounidense dictaminó que no puede regresar a Cuba hasta después de cumplir tres años en libertad condicional.

"Cuba reitera su disposición de dialogar con el Gobierno de los Estados Unidos para encontrar una solución al caso de Gross y continúa esperando una respuesta", señaló Vidal.

Gross recientemente contrató a un nuevo abogado, Jared Genser, un experto internacional en Derechos Humanos con sede en Washington entre cuyos clientes se ha incluido la líder opositora birmana y Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi.

Genser dijo a Reuters que Cuba había violado los derechos de su cliente a la libertad de expresión y afirmó que tuvo un juicio injusto. En este sentido, indicó que ha presentado una petición ante el Grupo de Trabajo de la ONU sobre la Detención Arbitraria para que se pronuncie en contra de Cuba. El grupo de trabajo de la ONU no tiene poder para hacer cumplir un fallo en contra de Cuba, pero su decisión podría presionar al Gobierno de La Habana.

"Un Gobierno que detiene injustamente a una persona normalmente sólo les deja salir cuando los costos son sustancialmente mayores que los beneficios de detenerlos", subrayó Genser. "He visto cómo una opinión de Naciones Unidas es una herramienta muy eficaz cuando se combina con los esfuerzos políticos apropiados y de promoción de relaciones públicas", agregó.

Genser también instó a Cuba a permitir que Gross sea examinado por un médico independiente. El verdadero estado de su salud no puede ser evaluado por los médicos que lo han visto hasta el momento, que también son "agentes del Gobierno cubano", dijo.