Actualizado 26/08/2010 23:32

Cuba.- El ex preso político Ariel Sigler Amaya recibe el alta médica en Miami donde se instalará de forma definitiva


MADRID, 26 Ago. (EUROPA PRESS) -

El ex preso político cubano Ariel Sigler Amaya recibió este jueves el alta médica del Hospital Jackson Memorial de Miami, en Estados Unidos, donde previsiblemente fijará su residencia de forma definitiva tras culminar el tratamiento que recibe para la paraplejia que sufre fruto de sus siete años de prisión en la isla.

El disidente de la llamada Primavera Negra de 2003 fue recibido por un nutrido grupo de cubanos en la casa de su hermano Miguel donde pasará los próximos meses, hasta que concluya el tratamiento que recibe para paliar la paraplejia funcional que lo dejó en silla de ruedas.

En una conversación telefónica, Sigler Amaya explicó a Europa Press que tendrá que volver al hospital tres días por semana aunque según vaya haciendo efecto el tratamiento de fisioterapia podrá ir "solo dos días o incluso cada semana, depende de cómo lo reciba".

"No es un alta porque me curé, sino porque puedo seguirlo desde casa con medicamentos y masajes en el hospital", indicó el ex preso político al tiempo que descartó que la suya vaya a ser una recuperación temprana. "No me dieron un diagnóstico definitivo, me dijeron que podría tardar de 2 a 6 meses en volver a caminar".

El pasado 28 de junio Sigler Amaya llegó a Miami con un visado humanitario para recibir atención médica después de recibir una licencia extrapenal en el marco de la oleada de liberaciones anunciada por el Gobierno cubano, fruto del diálogo con la Iglesia Católica.

Ahora, el disidente dice que no volverá a la isla "porque el régimen de los hermanos Castro, (Raúl y Fidel), no quiere personas que lleguen de Estados Unidos, los considera potencialmente peligrosos". Así, Sigler Amaya manifestó su convencimiento de que el Gobierno no le concederá el permiso de ingreso a Cuba.

"Mientras estén los Castro en el poder yo no vuelvo, mientras esté la dictadura no podré hacerlo porque no me van a dar el permiso, como ha pasado con otros ex presos que hay aquí (Estados Unidos)", agregó.

En consecuencia, el opositor adelantó que no solicitará la autorización de ingreso a la isla. "No va a resultar, así que no vamos a perder el tiempo en cosas que ya sabemos". Así, indicó que permanecerá en Miami incluso después de concluir el tratamiento. "No tengo perspectivas de abandonar este país e irme a otro", aclaró.

De momento, Sigler Amaya se alojará en la casa de su hermano a la espera de que llegue su esposa, quien ya ha recibido el visto bueno de las autoridades cubanas para viajar a Estados Unidos. "Solo falta fijar la fecha de vuelo y que vengan sus dos hijos que ya son parte de la familia", apuntó.