LA HABANA, 17 Dic. (Reuters/EP) -
El Gobierno de Cuba ha denunciado este lunes que existen "personas poderosas" en Washington que quieren "aplicar medidas cada vez más hostiles y severas" con el fin de dañar las relaciones diplomáticas, una situación, han dicho desde La Habana, que no es deseada ni por el Gobierno ni por el pueblo cubano, pero que en caso de que se produjera estarían preparados "para afrontarla".
"Hay personas poderosas en el Gobierno de Estados Unidos que quieren aplicar medidas cada vez más hostiles y severas", ha lamentado Carlos Fernández de Cossio, el director general del Ministerio de Asuntos Exteriores de Cuba.
"Si fuera así, estamos listos para enfrentarnos a esa realidad, pero no es lo que el pueblo, ni el Gobierno de Cuba desea", ha explicado Fernández de Cossio en una rueda de prensa en la capital de la isla.
Las relaciones entre Cuba y Estados Unidos se habían restablecido en cierta medida durante la Administración de Barack Obama. Si bien el bloqueo económico de Washington ha seguido funcionado, el expresidente demócrata había levantado ciertas restricciones comerciales y turísticas, y además había incluso visitado La Habana en 2016.
Sin embargo, bajo el mandato del actual presidente, Donald Trump, se han endurecido las restricciones y se han impuesto nuevas sanciones a las que hasta entonces no habían recurrido, bajo el argumento de estar presionando al Gobierno de Cuba para que ponga fin a las supuestas violaciones contra los Derechos Humanos que se estarían cometiendo.
No sólo ha impuesto penalizaciones a los envíos de petróleo venezolano a la isla, sino que además ha dado potestad a los ciudadanos estadounidenses para que presenten demandas contra aquellas compañías extranjeras que han negociado con las empresas cubanas que en su momento fueron nacionalizadas después de la revolución de 1959 llevada a cabo por Fidel Castro.
Desde el Gobierno cubano se ha argumentado que Estados Unidos no tiene "autoridad moral" para cuestionar a nadie acerca de supuestas violaciones de Derechos Humanos y además ha recordado a Washington que no debe intervenir en los asuntos internos de ningún país.
Con vistas a una reelección en las elecciones de 2020, el magnate Donald Trump estaría, según algunos analistas políticos, endureciendo y hostigando al Gobierno de Cuba con el fin de lograr el beneplácito y los votos de la influyente y beligerante comunidad de exiliados cubanos que residen en Florida.