LA HABANA, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de 14 cubanos fueron liberados tras un secuestro de diez días en la bahía de México, donde fueron torturados por los captores. Las víctimas habían pactado con la mafia un pago de 10.000 dólares por cabeza (6.650 euros) a cambio de que les transportaran hasta la frontera estadounidense. Sin embargo, el incumplimiento del pago llevó a los mafiosos a secuestrar y torturar a los emigrantes cubanos para conseguir el dinero acordado, según informó el diario oficial 'Granma'.
Los cubanos partieron de Isla de Juventudes donde los traficantes de personas les recogieron en una lancha para llevarles junto a otros hasta Cancún. Una vez allí, cada uno de los indocumentados pagaría 10.000 dólares a los mafiosos para poder continuar su viaje y cruzar la frontera hacia Estados Unidos.
"El trato en la lancha fue bueno, porque todo el mundo dijo que tenía los 10 000 dólares. Yo aspiraba a que me soltaran, y luchar para seguir adelante, pero no fue así", explicó Kendry Melenilla, que abandonó su trabajo en Cuba como camarero del hotel 'La Cubana'.
El acuerdo con los traficantes obligaba a los tripulantes a entregar el dinero nada más arribar a México, ya fuera por ellos mismos o a través de ingresos efectuados por sus familiares. Sin embargo una vez allí, los traficantes solo dejaron seguir el viaje a los que aportaron el dinero, el resto fueron secuestrados.
"Solo uno pagó los 10 000 dólares, y otro escapó no sé ni cómo cuando tocamos tierra. A nosotros nos dieron plan de machete. En la lancha todo parecía ser felicidad, pero al llegar no fue lo mismo. Cuando vieron que la gestión no daba resultado nos llevaron para la segunda casa, y allí nos torturaron los mismos cubanos que nos llevaron en la lancha", aclaró Melenilla.
Los captores torturaron a los cubanos para que les facilitaran un número de teléfono en la isla y amenazar a sus parientes. "Si tus familiares no tienen el dinero, te golpean para que lo escuchen por teléfono y sepan que es verdad. A mí me pusieron un revólver en la boca, me cortaron la punta de las orejas, me golpearon en la espalda y me dieron puñetazos. Uno me dio tantos golpes que le dolían los nudillos y le dijo al otro que siguiera él", señaló Melenilla.
Los secuestrados consiguieron lanzar al patio de al lado un total de cuatro notas, denunciando la situación en la que se encontraban y los malostratos que estaban sufriendo. "Escribí que en total había 14 cubanos secuestrados y nos estaban torturando, que llamaran a los federales o al Ejército. Sabíamos que los ruidos se oían fuera, porque gritábamos con la tortura y (los vecinos )llamaron a los federales. Por su acción inmediata y decidida nos rescataron", dijo el cubano.
Finalmente todos los rehenes fueron liberados y los cubanos fueron devueltos a la isla por las autoridades mexicanas, vía aérea. "Aprendí algo del lugar donde estaba. Hay un dicho que enseña que en Estados Unidos hay de todo, pero no a todos les toca. Las cosas no son como te las cuentan. Después que las vives, lo entiendes mejor", explicó Melenilla.
Las autoridades mexicanas confirmaron que un gran número de redes mafiosas de Miami, vinculadas al narcotráfico, controlan todo el tráfico de indocumentados cubanos que transita por la frontera con Estados Unidos.