MADRID, 22 Oct. (EUROPA PRESS) -
El grupo de 42 presos políticos que han llegado a España, fruto de las negociaciones entre la Iglesia Católica y el Gobierno de Cuba, solicitaron este viernes a la Unión Europea (UE) que no modifique la llamada Posición Común, vigente de 1996, que condiciona las relaciones con la isla a su avance en materia de Derechos Humanos.
En una entrevista concedida a Europa Press, varios de los disidentes instaron a los ministros de Asuntos Exteriores de la UE, que el próximo 25 de octubre analizarán en Luxemburgo la situación en la isla a raíz de las últimas excarcelaciones, que mantengan la posición vigente, ya que es una parte importante de la presión internacional sobre el régimen liderado por Raúl Castro.
Los opositores consideran que el escepticismo de los 27 es lo que ha favorecido la última oleada de liberaciones masivas, anunciada por el Arzobispo de La Habana, el cardenal Jaime Ortega, el pasado mes de julio, fruto de las negociaciones con el Gobierno de la isla.
"Preferiría que se mantuviera la Posición Común porque eso ha sido una de las cosas que ha obligado al Gobierno cubano a dar este paso (de las excarcelaciones)", dijo Ciro Pérez Santana, ex preso cubano que ha llegado este viernes a España acompañado por nueve familiares.
Además, los ex presos políticos advirtieron a los cancilleres europeos de que el golpe de timón efectuado por La Habana obedece, en gran parte, a las dificultades económicas que atraviesa el país a raíz de la crisis global y que le han obligado a realizar un drástico recorte en la administración pública que dejará en la calle a más de medio millón de funcionarios.
"Lo que les obligó a liberarnos es la situación económica del país que es grave (...) Ellos piensan que eliminando esas restricciones económicas que implica la Posición Común de la UE podrían aliviarla, por eso han liberado a los presos", apuntó Rolando Jiménez Posada, recién llegado de Cuba aunque el próximo martes viajará a República Checa, donde se instalará definitivamente.
A ello añadieron que el argumento aportado por el Gobierno de España para modificar el acuerdo europeo sobre la isla, aludiendo a la supuesta apertura del régimen manifestado mediante las recientes excarcelaciones, es una ilusión, ya que, en realidad, el Gobierno de Castro "liberó a personas que nunca debieron ser detenidas".
"La solicitud de variarla del Gobierno español parte de que han liberado a un grupo de presos, pero realmente eso es falso porque ha liberado a personas que nunca debieron ser detenidas porque opinar y pensar no debería ser delito", apuntó Jiménez.
Así, José Miguel Martínez, perteneciente al Grupo de los 75 opositores que fueron detenidos durante la Primavera Negra de 2003 y que llegó a España el pasado 24 de septiembre, indicó que el mantenimiento de dicha posición sería un importante gesto de apoyo de la UE a la disidencia interna de la isla.
"Es una forma muy positiva de Europa de apoyar a la disidencia interna porque obliga al Gobierno cubano a sentarse en la mesa de diálogo para que el pueblo cubano alcance los derechos y libertades que en los últimos 50 años le han sido negadas", aseveró Martínez.