Actualizado 09/12/2011 21:15

Raúl Castro menciona la posibilidad de un nuevo presidente en Cuba en un futuro "tal vez cercano"


MADRID, 9 Dic. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Cuba, Raúl Castro, mencionó la posibilidad de que haya un nuevo mandatario en la isla en un futuro "tal vez cercano", durante su participación el jueves en la Cumbre de la Comunidad del Caribe (CARICOM), celebrada en Trinidad y Tobago.

"En un futuro, tal vez cercano, el presidente que en ese caso represente a mi país podrá hacerlo en inglés: I speak english very very bad", dijo Castro, de 80 años, según cita el diario oficial cubano 'Granma'.

Esta sería la primera vez que Castro se refiere a la posibilidad de que en algún momento gobierne otra persona en Cuba, así como la importancia de que ese nuevo líder hable con fluidez inglés por la proximidad que tienen a Estados Unidos y por ser un idioma de gran importancia en las relaciones con el resto del mundo.

"Es decir que ya a mi edad va a ser difícil (aprender inglés), pero el próximo debe hablar inglés", comentó el mandatario que en 2006 sustituyó en la Presidencia a su convaleciente hermano Fidel, de 85 años, quien hace unos meses se desvinculó de todos los cargos políticos y militares que ejercía.

Castro encabeza actualmente un plan de reformas con las que intenta "actualizar" el modelo socialista que gobierna en la isla desde hace más de 52 años y actualmente atraviesa una de sus peores crisis económicas. Las medidas, aprobadas el pasado abril, implican una apertura inédita del sector privado y bancario, así como la posibilidad de que los cubanos compren por primera vez inmuebles y coches.

La disidencia ha criticado que este paquete de medidas no incluya importantes cambios en el esquema estatal que garanticen elecciones en las que participen grupos políticos de diferentes corrientes distintas al gobernante Partido Comunista de Cuba.

Durante su intervención en la cumbre, Castro afirmó que es "una necesidad" para Cuba que el próximo mandatario hable inglés, "no sólo por las proximidades de los vecinos del norte", al referirse a Estados Unidos, el mayor enemigo de La Habana.

"Si fuera por eso, preferíamos ser mudos; lo hacemos no sólo por la importancia de ese idioma a escala mundial en todos los aspectos, sino, además, porque somos caribeños, y todos los caribeños, como muy bien expresaba la honorable primera ministra de Trinidad y Tobago, deben hablar español y a su vez inglés, en el caso de los hispanoparlantes", indicó.