Actualizado 17/01/2012 17:02

Dimite el vicepresidente de Perú por tráfico de influencias

Omar Chehade
Foto: EUROPA PRESS/ANDINA

LIMA, 17 Ene. (EUROPA PRESS) -

   El segundo vicepresidente peruano, Omar Chehade, ha presentado su dimisión en medio de un escándalo por tráfico de influencias y a pocas horas de que el Parlamento vote sobre un pedido para que también sea destituido como legislador.

   Chehade presentó el lunes por la noche (madrugada del martes en España) su carta de renuncia al mandatario peruano, Ollanta Humala, quien el pasado noviembre le había pedido "dar un paso al costado" para poner fin a la polémica que afectó la imagen de su Gobierno y su lucha contra la corrupción.

   La Comisión Permanente del Congreso debatirá este martes a las 16.00 horas (22.00 horas en la España peninsular) la solicitud para que Chehade sea también desaforado de su cargo como diputado al Congreso, propuesta que podría ser rechazada solamente por los legisladores del gobernante partido Gana Perú y Alianza Parlamentaria.

   La Comisión de Ética del Congreso investigó al segundo vicepresidente por una reunión que mantuvo en un restaurante de Lima con tres generales de la Policía a los que supuestamente solicitó que intervinieran para favorecer al Grupo Wong en su litigio con la azucarera Andahuasi.

   Chehade ha desmentido estas acusaciones asegurando que únicamente se reunió con los generales para agradecerles su protección durante la campaña electoral para las presidenciales y para tratar temas relacionados con la seguridad en la capital.

   Si bien ha reconocido que en el marco de esta reunión dos de los generales conversaron sobre el conflicto entre ambas empresas, ha aseverado que se mantuvo al margen de este diálogo, que habría durado apenas unos minutos.

   El pasado diciembre, la subcomisión de Acusaciones Constitucionales del Congreso emitió un informe en el que sugirió la destitución de Chehade como legislador, así como su inhabilitación para ejercer cargos públicos durante cinco años.

   Según los miembros de esa subcomisión, se encontraron indicios de que Chehade habría incurrido en el delito de patrocinio ilegal, al excederse de sus funciones como congresista y no como vicepresidente, ya que la reunión con los generales se produjo cuando Humala se encontraba en Perú.

   De acuerdo a las leyes locales, el cargo de vicepresidente tiene un sentido más que todo simbólico y sólo se ejerce cuando el mandatario peruano sale del país.