BUENOS AIRES, 30 May. (Notimérica) -
Este lunes la canciller argentina Susana Malcorra renunció a su cargo por "motivos personales", momento en el que el presidente del país, Mauricio Macri, y su jefe de Gabinete, Marcos Peña, anunciaron el nombre del sucesor de la que fue candidata a la Secretaría de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) el pasado año, cuando salió vencedor el portugués Antonio Guterres en el mes de octubre.
Su reemplazante como titular de Exteriores será el actual embajador de Argentina en Francia, Jorge Faurie, que tomará posesión de su cargo el próximo 12 de junio, una vez haya finalizado la agenda política de Malcorra en Estados Unidos en el marco de una reunión con los miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
La extensa carrera profesional del que será el nuevo canciller del país incluye el desempeño como vicecanciller del exvicepresidente Carlos Rucakuf, además de ser jefe de protocolo durante el Gobierno del mandatario Carlos Menem (1989-1999). También ha sido embajador de Argentina en diversos países iberoamericanos como Venezuela (1978-1979), Brasil (1987-1989) y Chile (1989-1992).
Además, el próximo canciller argentino obtuvo el cargo de la Dirección Nacional de Ceremonial del Ministerio de Relaciones Exteriores entre 1998-1999 y fue jefe de Gabinete de la Secretaría de Relaciones Exteriores de la misma cartera en 1997-1998; así como director del Mercado Común del Sur (Mercosur) del Ministerio de Relaciones Exteriores entre 1992-1994.
Anteriormente a desempeñar su puesto como embajador de Argentina en París (2015-2017), Faurie --que será el primer diplomático en ocupar el ministerio de Relaciones Exteriores en casi 30 años-- desempeñó sus funciones en la Secretaría de Coordinación y Cooperación Internacional entre 2014 y 2015.
Cabe destacar que su impecable currículum se vio manchado en septiembre de 2002, cuando fue desplazado de su cargo como vicecanciller por ser sospechoso de mantener numerosas cuentas bancarias en Suiza sin declarar --además de diversas sociedades comerciales en Argentina-- y fue expulsado y mandado por Ruckauf como embajador a la capital de Portugal, Lisboa (2002-2013).
De acuerdo con el diario argentino 'La Nación', Faurie tuvo que dejar su cargo en la vicecancillería tras ser acusado por la Oficina Anticorrupción por no declarar una empresa llamada Costes S.R.L., que compartía con el secretario privado de Carlos Menem, Ramón Hernández. Este se vio beneficiado por su socio cuando, como director nacional de Ceremonial, Faurie le renovó por cinco años su pasaporte diplomático, que no lo devolvió cuando dejó su cargo a pesar de que los políticos pierden el derecho a usarlo cuando abandonan su puesto.