Actualizado 10/09/2010 02:50

Disidentes cubanos piden ayuda a Zapatero y Obama


MADRID, 10 Sep. (EUROPA PRESS) -

Más de 600 disidentes cubanos enviaron este jueves una carta al presidente de Cuba, Raúl Castro en la que le solicitan que reconozca a los distintos grupos que conforman la sociedad civil de la isla y que ratifique los convenios sobre Derechos Humanos que el Gobierno suscribió en 2008. Además, enviaron otras cuatro misivas a los presidentes de España, José Luis Rodríguez Zapatero, y de Estados Unidos, Barack Obama, así como al arzobispo de La Habana, Jaime Ortega, y a la Unión Europea para que impulsen la consecución de estos dos objetivos.

Unos 647 miembros de la sociedad civil de Cuba, "pertenecientes a distintas corrientes y tendencias", solicitaron a Castro que reconozca la diversidad del tejido social del país y que ratifique los convenios internacionales sobre Derechos Humanos, suscritos en 2008, para solucionar una "dramática situación" que el propio mandatario ha calificado de "grave", según explicó a Europa Press el disidente cubano Darsi Ferrer en una conversación telefónica.

El médico independiente confirmó el envío de estas cartas a sus destinatarios --a través de la embajada de España y de Bélgica en Cuba, la Oficina de Intereses de Estados Unidos en la isla y el Arzobispado de La Habana-- por considerar que "son cuatro actores vinculados a la realidad cubana y muy influyentes en ella, cada uno por diversas razones".

En el caso de España y de la Iglesia Católica, el opositor explicó que apelan a Rodríguez Zapatero y al cardenal Ortega, por el papel que tanto el Gobierno español como la jerarquía eclesiástica de la isla han jugado en las negociaciones con el régimen castrista para conseguir la liberación de los 52 presos políticos de la Primavera Negra de 2003 que aún permanecían recluidos.

En concreto, recuerdan que "España dio muestras de gran sabiduría al no excluir a ningún sector de la sociedad civil durante la transición", por lo que confían en que el Gobierno apoye las reivindicaciones de la disidencia, "a pesar de que las excarcelaciones conseguidas son deportaciones forzosas", ya que hasta ahora todos los presos que han sido liberados han viajado a la península, apuntó a título personal Ferrer.

En referencia a Estados Unidos, los firmantes destacan "el compromiso moral" adquirido por las distintas administraciones de este país con la defensa de los derechos y libertades fundamentales de los cubanos, especialmente con los más de dos millones que viven en territorio norteamericano. Así, aluden a "vínculos de carácter geográfico, histórico, cultural y social, más profundos que las circunstancias de los últimos 50 años", marcados por el embargo comercial de Washington a la isla.

"Queremos que el Gobierno de Estados Unidos sea consciente de que las diferencias entre los dos gobiernos (el de Washington y La Habana) no reflejan el sentir de la sociedad civil cubana", indicó el médico independiente.

Además, se dirigieron a la Unión Europea porque "ha dado muestras de su interés por solucionar los problemas de Cuba" mediante el debate de la Posición Común, en el que, según indicó Ferrer, no pretenden influir con esta misiva. "únicamente pedimos que desarrolle una política coordinada para fortalecer los vínculos con la sociedad civil" y garantizar el respeto de los Derechos Humanos en la isla.