Actualizado 20/09/2016 18:05

Las dos caras de Peña Nieto: Defiende a los migrantes en la ONU y en México aumentan las detenciones

Peña Nieto
REUTERS

CIUDAD DE MÉXICO, 20 Sep. (Notimérica) -

El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, presentó en la sede de Naciones Unidas en Nueva York un discurso en el que ensalzó lo positivo de las migraciones, destacando la necesidad de "tender puentes". "La historia demuestra que no hay barreras que detengan el movimiento de las personas", aseguró el mandatario mexicano, aunque estas declaraciones disten mucho de las políticas de migración aplicadas en su país.

Desde 2014, año en el que se aprobó el 'Plan Frontera Sur', las detenciones de migrantes -que suelen acabar en deportaciones- han sido la política a seguir por el Gobierno Mexicano, en contra de lo que, de cara al exterior, defiende el presidente. Según la 'Unidad de Política Migratoria', solo en 2015 fueron detenidos 198.141 migrantes, la mayor parte de origen centroamericano.

En 2016, hasta el mes de julio, 99.768 migrantes fueron capturados, un 63% más alto que en 2014 y hasta un 88% más que en 2013, el primer año de Peña Nieto en Los Pinos.

Además del aumento de las detenciones, el Gobierno de México está cercando las vías ferroviarias, de manera que las detenciones en las vías del tren aumentaron un 190% de 2013 a 2015, llegando a alcanzar, en este último año, los 2.351 migrantes capturados en estas vías.

El propio Peña Nieto corroboró estos datos el pasado 3 de septiembre cuando, en su encuentro con el candidato republicano a la presidencia de EEUU, Donald Trump, coincidió con el magnate en la necesidad de blindar la frontera sur de México. Estas declaraciones del presidente mexicano fueron precedidas por otras que expresaban su rechazo a la propuesta de Trump de construir un muro en la frontera con Estados Unidos.

El 'Programa Frontera Sur' está conllevando que muchos migrantes busquen rutas alternativas para acceder al país, alejados de los trenes y los albergues, lo que supone un riesgo para estas personas al quedar expuestos a la delincuencia y el crimen organizado. El instituto Nacional de Migración registró, entre enero de 2015 y junio de 2016, 595 casos de agresión a migrantes, siendo el 35% secuestros.

POLÍTICAS DE ASILO

Las políticas migratorias de México no solo están siendo duras en cuanto a las devoluciones, si no también con el asilo. Durante los primeros seis meses de 2016, México recibió 3.486 solicitudes de asilo, la mayor parte de ellas debido a la búsqueda de refugio por la violencia pandillera en Centroamérica.

El presupuesto dedicado a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR), aunque en 2016 aumentaron un 169% las solicitudes de asilo con respecto a 2013, se ha mantenido congelado por debajo de los 26 millones de pesos. Este dato contrasta con los 670 millones dedicados al Instituto Nacional de Migración (INM), organismo encargado de detener a los migrantes indocumentados y retenerlos hasta su deportación.

Por último, con respecto a la migración infantil México también es inflexible. La ONG 'Human Rights Watch' denunció en marzo de este año que menos del 1% de los menores detenidos por las autoridades mexicanas adquieren el reconocimiento de refugiados. Los motivos de esta cifra tan baja giran en torno al hecho de que los agentes migratorios no informan a los menores de que pueden solicitar este reconocimiento.