MADRID, 8 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, ha defendido este viernes que la prensa del país se mantiene "libre y fuerte" a pesar de que el mayor grupo de radiotelevisión de Filipinas, ABS-CBN, perdiera su permiso de retransmisión después de que el Parlamento no revalidara la franquicia con la que se le autorizó hace 25 años.
Tal y como ha expresado el portavoz de Duterte, Harry Roque, las voces opositoras siguen teniendo "espacio" aunque haya cerrado la mayor cadena de televisión. "Filipinas sigue teniendo una prensa libre donde los críticos y la oposición pueden hablar y expresar su aversión al Gobierno", ha insistido.
Así, ha señalado que Manila comparte la visión del Departamento de Estado estadounidense sobre la importancia de unos medios de comunicación independientes para las sociedades democráticas.
"Esto nunca ha cambiado para el presidente o su Administración", ha manifestado, según informaciones de la propia ABS-CBN, que ha recurrido al Supremo en un intento de paralizar la suspensión de retransmisión ordenada por la Comisión Nacional de Telecomunicaciones del país (NTC).
"El público necesita los servicios de la ABS-CBN ahora más que nunca dado que el país se enfrenta a los duros efectos de la Covid-19. En estos momentos de emergencia pública sanitaria, la cadena desempeña un papel significativo y da trabajo a miles de personas", indicó la cadena el jueves en su solicitud a la corte.
Este mismo viernes, el Departamento de Estado del país norteamericano ha expresado su preocupación sobre la situación de la cadena y ha subrayado la relevancia de unos medios "libres" en plena pandemia de coronavirus.
"Los medios independientes juegan un papel fundamental a la hora de facilitar el intercambio de información e ideas, lo cual es clave para una sociedad democrática próspera", ha indicado en un comunicado la portavoz del Departamento, Morgan Ortagus.