Denuncian la muerte de tres de sus compañeros de la comunidad shuar en enfrentamientos con la Policía
QUITO, 1 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) y el Movimiento de Campesinos del Ecuador (Ecuarunari) retomaron este miércoles las movilizaciones para protestar contra la propuesta de ley del Gobierno de Rafael Correa para regular el uso del agua del riego y otras actividades como la minera, pese a los llamamientos del presidente al diálogo. Correa se enfrenta a la primera protesta social de dimensiones desde que asumió el cargo en enero 2007.
El movimiento indígena critica que la propuesta de ley, que actualmente se encuentra en trámite parlamentario en la Asamblea Nacional, se traducirá en la privatización de un recurso vital como es el agua.
El paro indefinido convocado por CONAIE el domingo por la noche había sido suspendido el lunes por la tarde, tras alcanzar un acuerdo con el Gobierno para abrir un proceso de diálogo.
Sin embargo, cientos de indígenas de las comunidades shuar y achuar, con flechas y con los rostros pintados en señal de 'guerra', han retomado en las últimas horas las protestas en las provincias amazónicas del país, cortando con piedras, troncos y neumáticos las vías Macas y Puyo de acceso a la infraestructura petrolera en el país al tráfico en la región amazónica, según imágenes difundidas por la televisión local.
"Invitamos a los sectores sociales a juntarse y luchar para parar la prepotencia de un Gobierno que insulta y nos quiere desprestigiar", explicó el líder indígena de Ecuarunari, Humberto Cholango, ante cientos de seguidores del movimiento.
Por su parte, el presidente de la CONAIE, Marlon Santi, admitió que los indígenas no van a "ceder ni a detener la movilización" sino que, por el contrario, el movimiento "se radicaliza en todas las provincias". "Hay convocatorias a nivel nacional y regional", precisó en declaraciones a los medios locales recogidos por el diario 'El Universo'.
PRIMERAS VÍCTIMAS DE LA PROTESTA
Los indígenas denunciaron anoche la muerte de tres de sus compañeros shuar --dos de ellos maestros-- en enfrentamientos este miércoles con efectivos de la Policía en el sector del puento sobre el río Upano, que delimita las provincias amazónicas de Morona Santiago y Pastaza, cuando éstos intentaron desmontar los piquetes levantados, informó COAIE en un comunicado. Al menos otras 40 personas resultados heridas en los enfrentamientos.
Por su parte, el ministro de Gobierno, Gustavo Jalkh, instó "a la calma al país" en unas declaraciones televisadas, sin poder confirmar ni desmentir la muerte de la persona fallecida cuya identidad ha trascendido a los medios de comunicación, al esgrimir que los indígenas impidieron que una ambulancia llegara al lugar del enfrentamiento. El Gobierno cifra en 20 los policías heridos en los altercados.
CORRE LLAMA "CON GUSTO" AL DIÁLOGO
Las movilizaciones se han retomado pese a los llamamientos de Correa al diálogo, después de que días atrás el propio presidente calificara de "fracaso" la movilización indefinida que comenzó la noche del domingo pasado y a los indígenas de "ponchos dorados" por anteponer intereses personales a los del país.
"Hermanos indígenas, es mucho más lo que nos une que lo que nos separa, no sean instrumentos de sus propios explotadores. Levanten la medida de hecho y con todo gusto nos sentaremos a dialogar", subrayó este miércoles el presidente ecuatoriano en un discurso televisado por las cadenas de televisión privadas.
Por su parte, el presidente de la Confederación de Nacionalidades Amazónicas del Ecuador (Confenaie), Tito Puanchir, aseguró que insistirán al Gobierno sobre la necesidad de revisar el proyecto de Ley de Aguas y en la regionalización del Amazonas.
Su 'número dos', Inés Shinguano, advirtió sin embargo que, si se confirman las muertes de sus compañeros indígenas, no habrá diálogo con el Gobierno y responsabilizó al presidente Correa de reprimir a los pueblos indígenas.
Aunque el Gobierno de Correa ha desplegado un fuerte dispositivo policial y militar para sofocar la protesta indígena y, sobre todo, proteger la infraestructura petrolera del país.
La petrolera estatal Petroecuador confirmó sin embargo que la producción no ha sido paralizada por las protestas y, por el contrario, funciona con total normalidad.
De hecho, el ministro de Gobierno Jalk admitió que el Ejecutivo de Quito tendrá que analizar la posibilidad de declarar el estado de emergencia en el país si los indígenas tratan de "secuestrar" a Policías. "Tendríamos que analizar incluso esa medida", explicó.