Actualizado 02/07/2015 09:53

Cuba reclama el fin del bloqueo y la devolución de Guantánamo para normalizar relaciones

Guantanamo Bay
Foto: BOB STRONG / REUTERS

Pide una compensación económica por los daños sufridos y que dejen de financiarse programas de apoyo a la "subversión"

   MADRID, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -

   El Gobierno cubano ha reclamado este miércoles el levantamiento del bloqueo y la devolución de la base naval de Guantánamo por parte de Estados Unidos para que pueda producirse la plena normalización de las relaciones entre los dos países, suspendidas desde hace más de cinco décadas.

   En un comunicado, el Ejecutivo de Raúl Castro ha indicado que con la decisión adoptada por los dos países de reabrir sus embajadas el próximo 20 de julio y restablecer las relaciones diplomáticas, también ratifican "la intención de desarrollar relaciones respetuosas y de cooperación entre ambos pueblos y gobiernos, basadas en los principios y propósitos consagrados en la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional".

   Así, el Gobierno cubano ha asegurado que "ha tomado la decisión de restablecer las relaciones diplomáticas con Estados Unidos en pleno ejercicio de su soberanía, invariablemente comprometido con sus ideales de independencia y justicia social, y de solidaridad con las causas justas del mundo, y en reafirmación de cada uno de los principios por los que nuestro pueblo ha derramado su sangre y corrido todos los riesgos".

   Con el paso dado hoy, prosigue el comunicado, "concluye la primera etapa de lo que será un largo y complejo proceso hacia la normalización de los vínculos bilaterales" en el marco del cual habrá que resolver "un grupo de asuntos derivados de políticas del pasado, aún vigentes, que afectan al pueblo y a la nación cubana".

PETICIONES

   Así, el Gobierno cubano advierte de que Cuba no podrá tener "relaciones normales" con Estados Unidos "mientras se mantenga el bloqueo económico, comercial y financiero" que supone "el obstáculo principal al desarrollo de nuestra economía, constituye una violación del Derecho Internacional y afecta los intereses de todos los países, incluyendo los de Estados Unidos".

   Igualmente, La Habana califica de "indispensable" la devolución del "territorio ilegalmente ocupado por la Base Naval en Guantánamo" así como el cese de "las transmisiones radiales y televisivas hacia Cuba que son violatorias de las normas internacionales y lesivas a nuestra soberanía".

   El Gobierno cubano también pide que "se eliminen los programas dirigidos a promover la subversión y la desestabilización internas, y se compense al pueblo cubano por los daños humanos y económicos provocados por las políticas de Estados Unidos".

RECONOCIMIENTO PARA OBAMA

   Así las cosas, el Gobierno de Raúl Castro ha reconocido las "las decisiones adoptadas hasta el momento por el presidente Obama de excluir a Cuba de la lista de Estados patrocinadores del terrorismo internacional, de instar al Congreso de su país a levantar el bloqueo y de comenzar a adoptar medidas para modificar la aplicación de aspectos de esta política en uso de sus prerrogativas ejecutivas".

   Por otra parte, el Gobierno cubano ha reconocido que en el proceso de normalización de las relaciones "habrá que construir las bases de unos vínculos que no han existido entre nuestros países en toda su historia".

   En este sentido, puntualiza que "estas relaciones deberán cimentarse en el respeto absoluto a nuestra independencia y soberanía; el derecho inalienable de todo Estado a elegir el sistema político, económico, social y cultural, sin injerencia de ninguna forma; y la igualdad soberana y la reciprocidad, que constituyen principios irrenunciables del Derecho Internacional".

   "El Gobierno de Cuba reitera la disposición a mantener un diálogo respetuoso con el Gobierno de Estados Unidos y a desarrollar relaciones de convivencia civilizada, basadas en el respeto a las diferencias entre ambos gobiernos y en la cooperación en temas de beneficio mutuo", añade la declaración.

   Por último, el Ejecutivo cubano aclara que el país seguirá "enfrascado en el proceso de actualización de su modelo económico y social, para construir un socialismo próspero y sostenible, avanzar en el desarrollo del país y consolidar los logros de la Revolución".