Actualizado 10/02/2010 17:03

EEUU/Cuba.- Postergan los debates en el Congreso de EEUU para eliminar las prohibiciones para viajar a Cuba


WASHINGTON, 10 Feb. (Reuters/EP) -

Los esfuerzos bipartidistas en el Congreso de Estados Unidos para eliminar definitivamente las prohibiciones para viajar a Cuba --que se mantienen en vigor desde la Guerra Fría-- han sido postergados debido al protagonismo que ha tomado la reforma del sistema de salud, aunque los partidarios de eliminar estas restricciones confían en poder lograrlo este año.

"El respaldo no se ha debilitado, pero es claro que el debate sobre la reforma de la salud ha consumido el primer año de la administración (de Barack Obama) y ha tenido un impacto similar en términos de acción en el Congreso", dijo a Reuters el demócrata Bill Delahunt, coautor del proyecto.

Quienes apoyan los proyectos de ley para permitir que los estadounidenses viajen libremente a Cuba --introducidos el año pasado en el Senado y la Cámara de Representantes-- dijeron que un flujo de dólares del lobby pro embargo cubano norteamericano también podría estar influyendo en estos retardos.

El legislador republicano Jeff Flake, también coautor del proyecto, sostuvo que los votos para aprobar este año el Acta de Libertad para Viajar a Cuba están ahí, pero la mayoría demócrata en la Cámara está dividida sobre si someterlo o no a votación.

"Este no es un tema que esté arriba en su agenda ni mucho menos y es también un asunto que divide a parte de su caucus", apuntó Flake. "Todavía creo que podría aprobarse este año", señaló.

El proyecto de ley tiene 178 apoyos en la Cámara, 40 votos menos de los 218 necesarios pero un "número grande", en opinión de Flake. De ser aprobada, representaría un paso importante hacia el fin del embargo comercial de 48 años de Washington contra La Habana y podría inundar la isla de Gobierno comunista con turistas estadounidenses atraídos por las playas y la mística revolución.

La Asociación Nacional de Turismo estadounidense calcula que por lo menos unos 850.000 estadounidenses viajarían a Cuba --a sólo 145 kilómetros de la costa de Florida-- en el primer año si se levantan las sanciones. Operadores de turismo de ambos países se reunirán en marzo en el balneario mexicano de Cancún para hacer planes para ese día.

Los proyectos de ley sobre viajes a Cuba fueron presentados el año pasado, cuando Obama prometió "relanzar" las complejas relaciones con Cuba.

"EL DINERO HABLA"

En los últimos años los cubano-estadounidenses opuestos al Gobierno de la isla, hicieron generosas donaciones a legisladores demócratas con la esperanza de impedir fisuras en el embargo comercial.

Public Campaign, un grupo no partidario, calcula que los cubano-americanos partidarios de la línea dura han repartido más de 10 millones de dólares (7,2 millones de euros) en contribuciones a varios políticos desde el año 2004.

El director del Comité de Acción Política por la Democracia EEUU-Cuba, Mauricio Claver-Carone, informó de que el grupo ha trabajado por hacer de Cuba un asunto bipartidista. "Lo que queríamos era romper esa barrera política", afirmó a Reuters.

El turismo estadounidense sería un salvavidas para el Gobierno cubano, que atraviesa por una crisis de liquidez, aseguró el activista, y permitiría casi duplicar su Producto Interior Bruto durante el primer año.

Las divisiones entre los demócratas emergieron en noviembre, cuando 53 legisladores firmaron una carta contra los cambios en la actual política estadounidenses hacia Cuba, basándose en preocupaciones sobre Derechos Humanos en la isla.

Public Campaign, por su parte, señaló que 51 de los 53 legisladores habían recibido más de 850.000 dólares (618.850 euros) en contribuciones del Comité de Acción Política y otros donantes pro embargo.

"La carta, en mi opinión, fue una clara indicación de que no hay suficientes votos", comentó a Reuters la representante Debbie Wasserman Schultz, una demócrata de Florida, que reunió las firmas.

"Tengo unos 20 demócratas más que no firmaron la carta pero no votarán por levantar la prohibición de viaje. Eso, combinado con la abrumadora mayoría de los republicanos, indica que no hay suficientes votos", añadió.

Los partidarios del proyecto de ley reconocen que el Comité de Acción Pública ha sido efectivo. "Ellos siempre han tenido dinero y en Washington el dinero habla", agregó Delahunt.