MADRID, 11 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha informado de nuevos cargo contra seis personas por su papel en el asalto al Capitolio, de las cuales cuatro han reconocido formar parte del grupo paramilitar Three Percenters (Los del tres por ciento), lo que les convierte en los primeros de esta milicia en ser acusados formalmente por aquellos episodios ocurridos el pasado 6 de enero en Washington.
De acuerdo con el escrito de la acusación, los acusados coordinaron el viaje hasta Washington con la intención declarada de impedir el recuento de los votos electorales que confirmaban la victoria del presidente, Joe Biden, en las elecciones de noviembre, y además disponían de equipos tácticos y algunos de ellos entraron armados al Capitolio.
Se trata de las primeras acusaciones contra milicianos de Three Percenters, después de que ya se hayan presentados cargos contra más de una treintena integrantes de otros grupos paramilitares de extrema derecha, como Oath Keepers o Proud Boys.
Los acusados han sido identificados como Alan Hostetter, Russel Taylor, Erik Warner, Felipe Antonio Martinez, Derek Kinnison y Ronald Mele y se les han imputado cargos de conspiración para obstruir un procedimiento oficial y allanamiento ilegal de edificio público, detalla la cadena CBS.
La acusación señala a Hostetter como principal responsable del grupo e ideólogo del American Phoenix Project, fundado en la primavera de 2020 para protestar contra las restricciones impuestas por entonces por el coronavirus, desde cuyo perfil en redes sociales lanzó vídeos esparciendo teorías de la conspiración y animando a otros a acudir a las manifestaciones convocadas por Donald Trump el 6 de enero.
El 29 de diciembre, añade la acusación, Hostetter creó un grupo de Telegram con el nombre de 'La Brigada Patriota California-DC', en la que además de los otros cinco acusados se unieron otras treinta personas para coordinar los preparativos para el trasladado a la capital de Estados Unidos.
Entre los muchos mensajes que se escribieron en ese grupo alentando a la subversión, Russel Taylor escribió que a pesar de que la mayoría de ellos no se conocían, "todos están listos y dispuestos a pelear", marcando que el objetivo era "organizar un grupo de combatientes que se respalden mutuamente".
En el grupo también se preguntó si alguno contaba con experiencia previa en el Ejército o si se disponía de armamento. Las estrictas leyes de posesión de armas de fuego que rigen en Washington animó a muchos a proponer llevar "hachas", "aerosoles, "bates de béisbol" o "cuchillos", en vez de armas de fuego.
Después de participar en el mitin que Donald Trump dio a las puertas de la Casa Blanca, e incluso de intervenir como improvisados oradores ante pequeños grupos de insumisos, Taylor y Hostetter acudieron a los jardines del Capitolio y una vez allí fueron parte activa del ataque al Capitolio y contra algunos de los policías que intentaron contener a la turba.