Actualizado 20/01/2010 20:42

EEUU.- El FBI obtuvo de forma ilegal registros telefónicos entre 2003 y 2006 para sus investigaciones antiterroristas


WASHINGTON, 20 Ene. (Reuters/EP) -

El FBI violó la ley al obtener inadecuadamente miles de registros telefónicos en sus investigaciones en materia de terrorismo entre 2003 y 2006, según reveló este miércoles el inspector general del Departamento de Justicia, Glenn Fine.

"Este informe examina en detalle las prácticas defectuosas que el FBI empleó para obtener miles de registros telefónicos y la responsabilidad de los empleados del FBI por estas prácticas problemáticas", indicó Fine.

"El FBI ha recibido autoridad ampliada para obtener registros telefónicos cuando se enfrenta a sus responsabilidades críticas. Al mismo tiempo, el FBI debe usar su autoridad de acuerdo con la ley y las políticas del departamento", añadió.

El informe podría generar nuevas críticas al FBI, que ya se enfrenta a las preguntas del Congreso sobre si hizo lo suficiente para impedir el tiroteo del pasado noviembre en una base militar en Texas en el que murieron trece personas y cómo gestionó la investigación en torno al nigeriano que intentó atentar en un avión en Detroit el pasado 25 de diciembre. El senador Patrick Leahy, presidente del Comité Judicial, subrayó que "cuando los americanos violan la ley, hay consecuencias. Nadie en el FBI debería estar por encima de la ley".

El informe, de 289 páginas, afirma que el FBI emitió más de 700 cartas citando "circunstancias exigentes" para solicitar los registros de más de 2.000 números diferentes de teléfono entre 2003 y 2006. Muchas de las investigaciones no implicaban emergencia o circustancias de amenaza a vidas humanas, según el documento, y el FBI señaló, de forma imprecisa, que se habían solicitado citaciones de un gran jurado para los registros.

Un informe previo de 2007 determinó que el FBI había abusado de su poder obteniendo de forma ilegal o inadecuada registros telefónicos, financieros y de otro tipo secretos en investigaciones a sospechosos de terrorismo o espionaje.

Los informes previos del inspector general concluyeron que el uso por parte del FBI de las llamadas cartas exigentes sorteó los requisitos del Acta de Privacidad en las Comunicaciones Electrónicas y violó las directrices del fiscal general y la política del FBI.

Asimismo, el nuevo informe detectó el uso generalizado de peticiones incluso más informales para los registros telefónicos, en lugar de seguir el proceso legal adecuado. Así, el FBI solicitó estos registros por correo electrónico y en conversaciones cara a cara y telefónicas, o incluso en algunos casos escribiéndolo en un 'post-it'.

Por otra parte, el documento afirma que el FBI hizo peticiones informales de registros asociados a al menos 3.500 números telefónicos. En ocasiones, los empleados de las compañías telefónicas simplemente invitaron al personal del FBI a ver los registros en la patalla de su ordenador.

Así las cosas, Fin instó al FBI y al Departamento de Justicia a adoptar medidas adicionales para garantizar que la policía federal obtiene tales registros de acuerdo con la ley y con las polítias del Departamento de Justicia y para asegurarse de que los abusos del pasado no se repiten.

Además, recomendó que el FBI revise la conducta de los individuos implicados y determine si sería apropiado adoptar acciones displinarias o de otro tipo.

Por su parte, el FBI afirmó en un comunicado que nunca obtuvo el contenido de ninguna conversación telefónica, sólo el registro de las facturas de teléfono. "El informe no detecta intentos intencionados de obtener registros que el personal antiterrorista supiera que no estaba autorizado legalmente a obtener", aseveró su portavoz, Mike Kortan.