MADRID, 18 May. (EUROPA PRESS) -
El fiscal general de Estados Unidos, William Barr, ha afirmado este lunes que no espera que se abra una investigación criminal formal contra el expresidente Barack Obama o su vicepresidente y virtual candidato presidencial del Partido Demócrata, Joe Biden, a pesar de las reiteradas acusaciones del actual inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump.
Trump ha dado una especial importancia a esta investigación a cargo del fiscal de Connecticut, John Durham, sobre los orígenes de la investigación abierta en 2016 por el FBI sobre la posible coordinación entre la campaña electoral presidencial de Trump y Rusia y ha señalado personalmente a Obama y Biden por la misma, lo que denomina el 'Obamagate'.
"Conforme a la información que tengo a día de hoy no espero que el trabajo de Duham desemboque en una investigación criminal contra ninguno de los dos", ha afirmado Barr en declaraciones a la prensa desde la sede del Departamento de Justicia. "Nuestra sospecha sobre posibles hechos delictivos se centra en otras personas", ha remachado.
Estas palabras han sido en respuesta a una pregunta sobre las recientes declaraciones de Trump animando a investigar a Obama y otros altos cargos de la Administración anterior.
Barr ha respondido que no respondería a las palabras concretas de Trump, pero ha alertado de "los intentos cada vez más habituales de emplear la vía penal como arma política".
Barr encargó a Durham en octubre investigar si las agencias de Inteligencia de Estados Unidos actuaron de forma adecuada cuando analizaron los posibles vínculos entre la campaña de Trump y Rusia, algo que finalmente llevó a la investigación del fiscal Robert Mueller.
Trump, quien considera la investigación sobre la injerencia rusa una "caza de brujas", asegura que los funcionarios estadounidenses lanzaron una investigación para perjudicar sus opciones de lograr la Presidencia.
El propio Barr ha señalado este lunes que "lo que pasó el presidente durante las elecciones de 2016 y en sus dos primeros años de mandato fue aberrante". "Fue una grave injusticia sin precedentes en la historia de Estados Unidos", ha declarado.
"Las fuerzas de seguridad y los servicios secretos de este país participaron en la narrativa contra el presidente sobre la supuesta colaboración con Rusia que resultó falsa y finalmente infundada", ha remachado.
Trump y Obama han protagonizado en los últimos días un cruce de acusaciones. Hace unos días Trump calificó la gestión del actual presidente de "desastre caótico absoluto", y le acusó de "egoísta" y de mantener una actitud "tribal" al buscar enemigos. Trump ha respondido acusando a Obama de "incompetente" y "corrupto".