MADRID 3 May. (EUROPA PRESS) -
El secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, y el ministro para la Revitalización Económica japonés, Ryosei Akazawa, han acordado iniciar una ronda de consultas en materia de comercio con la intención de alcanzar un acuerdo en áreas esenciales para las relaciones bilaterales, tras un encuentro "franco y constructivo".
"Ha sido un placer reunirme con el ministro Ryosei Akazawa de Japón (...) para avanzar en nuestras discusiones para lograr un comercio justo y recíproco", ha manifestado Bessent en una publicación en su cuenta en la red social X.
El representante del Tesoro se ha mostrado "alentado" ante este compromiso "rápido y positivo" y se ha mostrado optimista ante la idea de llegar "pronto" a "un consenso sobre una serie de cuestiones bilaterales clave".
Durante el encuentro se han abordado "tanto los aranceles como las medidas no arancelarias, la importancia de la seguridad económica como seguridad nacional y otros temas de preocupación", según un comunicado oficial de Departamento del Tesoro en el que se reafirma la "fuerte relación bilateral entre Estados Unidos y Japón" y se deja la puerta abierta a "reuniones adicionales a nivel ministerial en el futuro cercano".
Este intercambio llega apenas una semana después de que Bessent se reuniera con el ministro de Finanzas de Japón, Katsunobu Kato, en la que fue su primera reunión bilateral en persona.
En esa ocasión, que marcó el "sólido inicio de las conversaciones comerciales bilaterales entre ambos países", el secretario y el ministro abordaron ya "una amplia gama de temas bilaterales", incluido el comercio recíproco, tal y como informó el Ejecutivo estadounidense en otra comunicación.
Estas citas bilaterales entre los gobiernos de Washington y Tokio se enmarcan en el contexto de una nueva ronda de contactos para tratar de tender puentes entre ambos países después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, llegase a anunciar aranceles del 24 por ciento a todas las exportaciones japonesas. Este gravamen ha quedado en suspenso durante mes y medio, pero Estados Unidos aún aplica uno del 10 por ciento que se suma a los ya en vigor sobre acero, aluminio y vehículos.