Actualizado 11/02/2011 19:53

EEUU/México.- EEUU eleva al rango de máxima prioridad la violencia de los cárteles en la frontera con México


WASHINGTON, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno de Barack Obama ha elevado a la 'categoría 1' en el rango de prioridades de seguridad del Estado la situación en la frontera con México ante la preocupación de que la violencia desatada por los cárteles de la droga llegue a suelo norteamericano, ha anunciado el director de Inteligencia de Estados Unidos, James Clapper.

En una comparecencia ante el Comité Selecto de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Clapper ha cuestionado los esfuerzos del Gobierno de Felipe Calderón para combatir el crimen organizado por considerar que son "inadecuados" para contener la actividad de las mafias.

"Su progreso es lento debido a límites en recursos, prioridades políticas que compiten entre sí y resistencia burocrática", ha dicho el funcionario al referirse a la estrategia de seguridad de Calderón, que ha implicado el despliegue de miles de soldados en la zona fronteriza.

Según datos de Washington, los cárteles del narcotráfico han logrado establecer alianzas con pandillas en Estados Unidos, lo que les ha permitido tener una presencia activa en 230 ciudades de esa nación, sin contar su participación en el cultivo ilícito de marihuana y en el tráfico de metanfetaminas.

"Este es ciertamente un gran problema y hemos decidido elevarlo recientemente a la categoría número uno en el marco de nuestras prioridades, que es la máxima, y estamos trabajando con las autoridades mexicanas en este sentido", ha afirmado en declaraciones citadas por medios locales.

Clapper ha confesado que la situación del crimen organizado en México "plantea enormes preocupaciones" para al Administración Obama "debido al evidente potencial de desbordamiento en los estados fronterizos".

En este contexto, el director de Inteligencia ha tenido que reconocer que del lado estadounidense "hay violencia relacionada con las drogas" pero no a los niveles de México, donde los cárteles del narcotráfico mantienen una encarnecida guerra que ha dejado más de 34.000 muertos en los últimos cuatro años.