Actualizado 27/12/2017 15:18

EEUU tiene cada vez más agentes de Seguridad Nacional desplegados en otros países, entre ellos iberoamericanos

Donald Trump y miembros de su Gobierno
REUTERS / JONATHAN ERNST

   El Departamento de Seguridad Interior tiene más de 2.000 agentes distribuidos en 70 países y varios cientos a bordo de buques o en aviones de vigilancia

   MADRID, 27 Dic. (OTR/PRESS/Notimérica) -

   El Departamento de Seguridad Interior de Estados Unidos va más allá de las fronteras del país norteamericano y desde la llegada del presidente Donald Trump a la Casa Blanca se ha producido un aumento significativo de agentes, lo que ha generado un aumento del gasto y protestas entre algunos países aliados por considerar que el alcance externo del departamento es exagerado, según informa el prestigioso diario 'The New York Times'.

   Cerca de 2.000 empleados de Seguridad Nacional están desplegados en unos 70 países alrededor del mundo, desde agentes especiales de Inmigración y Aduanas hasta funcionarios de la Administración de Seguridad en el Transporte.

   Además, hay funcionarios desplegados en el mar a bordo de buques de la Guardia Costera o en aviones de vigilancia sobre el Océano Pacífico y en el Mar Caribe.

   Según el diario estadounidense, la expansión que está efectuando el Departamento de Seguridad Interior ha generado tensiones entre algunos países europeos y sobre todo en Canadá, que dicen que EEUU está tratando de exportar sus leyes migratorias más allá de sus fronteras.

   Además, de las fricciones diplomáticas, un informe del Congreso estadounidense evidenció que el costo de un agente en el extranjero es cuatro veces superior a uno nacional. En septiembre, el Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes expresó su preocupación por los planes de desplegar agentes de aduanas adicionales en el extranjero en medio de la "escasez de personal en los puertos de entrada del país".

   Los legisladores han pedido que se evalúen los costos y beneficios de repartir a miles de empleados en el extranjero mientras el departamento busca contratar a 15.000 nuevos agentes fronterizos como parte de la lucha del presidente Trump contra la inmigración ilegal.

   Otros aliados del país norteamericano están conformes con el argumento facilitado desde Washington en el sentido de que aumentar el número de agentes refuerza la seguridad internacional en materia terrorista, tráfico de drogas o de personas.

   "Muchas amenazas a la patria comienzan en el extranjero, y es ahí donde tenemos que estar", ha aseverado James Nealon, uno de los máximos funcionarios del Departamento de Seguridad.

   Sin embargo, en Alemania, algunos legisladores han cuestionado el Programa de Asesoramiento de Inmigración antiterrorista de EEUU donde los viajeros en aeropuertos extranjeros son investigados y a veces entrevistados por agentes de aduanas y de Protección Fronteriza antes de que puedan embarcar en vuelos hacia Estados Unidos.

   Muchos en Canadá tampoco están a favor de las medidas que están implementando desde el Departamento de Seguridad Interior. Cientos de canadienses han enviado miles de cartas y mails a su primer ministro, en un volumen sin precedentes, protestando contra la legislación que permite a los funcionarios de aduanas de EEUU presentes en aeropuertos o estaciones de trenes canadienses que puedan interrogar, registrar y detener a sus conciudadanos.

   En su vecino del Norte, el Departamento de Interior de Estados Unidos tiene desplegados a más de 400 agentes, la mayor cantidad de funcionarios en cualquier país extranjero.

   En Tanzania, por ejemplo, investigadores de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos fueron acusados en mayo de emplear tácticas propias de la "mafia" para ayudar a extraditar a sospechosos de tráfico de drogas a los Estados Unidos antes de que concluyeran sus apelaciones.

   De todos los programas basados en el extranjero y en empleados fuera de sus fronteras, la misión de los aviones de vigilancia P-3 es posiblemente el programa del Departamento de Seguridad Nacional con el mayor alcance internacional.

   La flota de 14 aeronaves patrullan más de 70 millones de kilómetros cuadrados en el Golfo de México, el Mar Caribe y el Océano Pacífico, un área 14 veces mayor que el territorio continental de Estados Unidos.

   Las tripulaciones de los P-3 han participado en 145 decomisos de drogas el pasado año capturando miles de kilos de marihuana y cocaína.