MADRID, 25 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Egipto, Abdelfatá al Sisi, ha reiterado este jueves la oposición "categórica" de El Cairo a un "desplazamiento forzoso" de palestinos desde la Franja de Gaza hacia la península del Sinaí, en medio de las amenazas de Israel contra una ofensiva terrestre contra la ciudad de Rafá, situada en la frontera y donde hay más de 1,2 millones de palestinos, la mayoría de ellos desplazados desde otros puntos del enclave por los ataques israelíes.
"Ante estas devastadoras hostilidades, Egipto ha adoptado una postura clara y firme de oposición categórica a todo desplazamiento forzoso de palestinos de su tierra al Sinaí o cualquier otro lugar para proteger la causa palestina de su eliminación y defender la seguridad nacional de Egipto", ha sostenido en un discurso con motivo del 42º aniversario de la liberación de la península a raíz del acuerdo de paz con Israel, firmado en 1979.
"Egipto ha trasladado su firme posición y ha hecho esfuerzos incansables para lograr un alto el fuego inmediato y urgente y garantizar la entrada de ayuda humanitaria", ha defendido, antes de insistir en que El Cairo "ha adoptado medidas para impulsar el establecimiento de un Estado palestino independiente y soberano y para que los palestinos gocen de sus derechos legítimos".
Así, Al Sisi ha subrayado que la postura de Egipto "se fundamenta en la sólida e inequívoca determinación de Egipto desde el inicio de la guerra, que sirve como base de sus acciones, con el objetivo final de establecer la paz, la seguridad, la estabilidad y el desarrollo en la región, por el bien de sus pueblos", según la transcripción de sus declaraciones, facilitada por la Presidencia egipcia.
Las autoridades israelíes han insistido en que preparan planes para un posible asalto contra Rafá a pesar de las advertencias por parte de la comunidad internacional, incluidos sus principales socios. Israel lanzó su ofensiva contra Gaza a raíz de los ataques ejecutados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), que dejaron unos 1.200 muertos y cerca de 240 secuestrados.
Las autoridades gazatíes, controladas por Hamás, han elevado este mismo jueves a más de 34.300 los palestinos muertos por los ataques israelíes, cifra a la que se suman más de 480 muertos a manos de las fuerzas de seguridad de Israel y ataques perpetrados por colonos --al alza durante las últimas semanas-- desde ese fecha en Cisjordania y Jerusalén Este.