Publicado 08/09/2015 06:20

Envían a prisión a un militar retirado salvadoreño que pretendía vender armas a pandillas

SAN SALVADOR, 8 Sep. (Reuters/EP) -

Un tribunal de El Salvador ha ordenado este lunes enviar a prisión provisional a un coronel retirado acusado de poseer ilegalmente armas de guerra que supuestamente pretendía vender a las violentas pandillas que operan en el país centroamericano, según ha informado una fuente judicial.

Roberto Pineda, de 66 años, fue director de la extinta Policía de Hacienda (PH) a finales de la década de 1980, uno de los cuerpos de seguridad del Estado señalados por la Comisión de la Verdad de Naciones Unidas como responsables de varios crímenes de guerra y violaciones a los Derechos Humanos.

El juez décimo segundo de Paz de San Salvador instaló la mañana del martes una audiencia inicial contra el coronel retirado y dos de sus hijos, Rodrigo y Claudia Pineda Rodríguez, por posesión ilegal de armas, bajo la sospecha de tráfico de armas.

"Al final de la audiencia el juez decretó instrucción con detención contra el coronel retirado, quien será trasladado al penal de Metapán (noroeste de la capital)", tal y como ha informado la oficina de prensa de los tribunales a través de un comunicado.

El juez también ha dictado contra Pineda medidas sustitutivas a la detención, como no salir del país y no cambiar de domicilio, mientras que Claudia Pineda Rodríguez está obligada a presentarse a la próxima audiencia.

El militar y su hijo fueron capturados el jueves en su vivienda, situada en una colonia de clase media de la capital, cuando la policía allanó la residencia y encontraron varias armas de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas: dos ametralladoras Uzi, un fusil calibre 22, una escopeta 12, municiones para las armas y siete granadas fragmentadas M40 y M67, además de ropa militar.

El Salvador atraviesa una ola de homicidios, atribuida principalmente a las violentas pandillas que se disputan el control de las extorsiones y la venta de narcóticos, que mantiene atemorizada a la población.

La cantidad de homicidios en El Salvador se incrementó un 67,3 por ciento en los primeros ocho meses del año respecto al mismo período del año anterior, y marcó un récord en agosto en 4.246 muertes, de acuerdo a cifras oficiales.