Actualizado 01/12/2017 14:24

El escrutinio de votos en Honduras atraviesa su quinto día

Disturbios en Tegucigalpa por las elecciones presidenciales
REUTERS / EDGARD GARRIDO

   TEGUCIGALPA, 1 dic (Reuters/Notimérica) -

   Honduras ha entrado este viernes en el quinto día de 'limbo político', aquel fruto de un recuento de votos presidenciales que largamente se ha retrasado y que ha desatado disturbios en medio de acusaciones de fraude de la oposición. Se estima que, probablemente, la espera dure dos días más antes de arrojar el ganador de los comicios.

   La preocupación internacional por la crisis electoral del país centroamericano ha crecido paulatinamente. Con altas tasas de pobreza generalizada, una muy presente violencia por parte de las pandillas o maras, así como de las propias bandas de narcotraficantes, Honduras tiene una de las tasas de homicidios más altas del mundo.

   Tanto el hasta ahora presidente y candidato a la reelección de la centroderecha hondureña, Juan Orlando Hernández, como su rival, Salvador Nasralla, estrella de televisión de 64 años, se han autoproclamado presidentes y ganadores de la votación del pasado domingo.

   Y es que el escrutinio de votos ha sido de lo más oscilante. Un primer conteo favoreció al opositor con hasta cinco puntos de ventaja con el 57 por ciento de las mesas computadas. Sin embargo, un día y medio después la balanza se inclinó de forma repentina hacia el actual presidente, provocando enfrentamientos entre la policía y manifestantes que dejaron al menos 11 personas heridas.

   A última hora de este jueves, y ante la criticada demora del conteo, el presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Honduras, David Matamoros, atendió las peticiones de los observadores internacionales e indicó que el tribunal contabilizaría los votos de 1,031 mesas receptoras pendientes, o aproximadamente el 6 por ciento del total, que tenían irregularidades.

   Así, el escrutinio se completará en torno a dos días, lo que permitirá a la autoridad electoral declarar un ganador definitivo con el 100 por ciento de las mesas procesadas, dijo Matamoros. Con el conteo regular de las boletas completado, Hernández, del Partido Nacional, tenía una ventaja de menos de 50,000 votos sobre su rival centrista.

   Luis Larach, presidente del poderoso organismo empresarial COHEP, ha declarado a la agencia de noticias 'Reuters' que dada la pequeña diferencia de 1.5 puntos porcentuales entre los candidatos, el conteo de votos irregulares sería crucial para decidir el ganador, asegurando que "para mí, todavía está en el aire".

   Nasralla, una de las caras más conocidas de Honduras y que cuenta con el respaldo del expresidente Manuel Zelaya --izquierdista derrocado en 2009 luego de proponer un referéndum sobre su reelección-- ha dicho que no aceptará el resultado del tribunal debido a las dudas sobre el proceso de escrutinio.

   Zelaya acusó el jueves en una carta al tribunal de "crímenes electorales", mientras que uno de los cuatro magistrados del TSE señaló "serias dudas" sobre el proceso.

   La Organización de Estados Americanos (OEA) pareció haber rescatado la credibilidad de las elecciones el miércoles al obtener declaraciones firmadas de ambos candidatos, prometiendo respetar el resultado final. Sin embargo, unas horas más tarde Nasralla rechazó el acuerdo de la OEA, diciendo que sus oponentes estaban tratando de robarlo e instó a los partidarios a tomar las calles en señal de protesta.

   Se han registrado protestas violentas en el país, donde los manifestantes instalaron barricadas, quemaron llantas y bloquearon autopistas, mientras que varios puestos de peaje de autopistas fueron incendiados. La policía disparó gases lacrimógenos contra manifestantes

   Las dudas sobre el proceso han llevado a acusaciones de la oposición de que Hernández pudo haber influido en el tribunal electoral. Matamoros ha pedido disculpas a los hondureños por lo que llamó una falla en los sistemas.