MADRID, 15 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha vuelto a rechazar este miércoles mantener una conversación telefónica con el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, y ha avisado de que no tendrá ningún contacto con el Gobierno hasta que sea cesado su vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, y el Estado asuma el pago de las nóminas de todos los trabajadores y autónomos que no pueden desempeñar su labor por el estado de alarma.
En un videocomunicado, Abascal ha revelado haber recibido una llamada de la oficina del presidente en el Palacio de la Moncloa para una conversación telefónica este jueves con el objetivo de sondear la posibilidad de alcanzar un pacto de reconstrucción económica y social tras la crisis del coronavirus.
Como ya hizo la pasada semana, Abascal ha rechazado mantener esa interlocución con el jefe del Ejecutivo. A su juicio, no es momento de "propaganda" sino de "acciones decididas" para detener "la destrucción de vidas, empleos y libertades" que está propiciando el actual Gobierno "negligente, falsario y desleal".
Abascal ha insistido en su exigencia de la dimisión de todo el Consejo de Ministros para la formación de un Gobierno de emergencia nacional apoyado por PSOE, PP y Vox.
Mientras, considera prioritario el cese de Iglesias. "Cómo se atreven a reclamar unidad a las fuezas políticas cuando tienen un vicepresidente que ataca al jefe del Estado", ha preguntado el líder de Vox recordando la defensa de Iglesias de la República este mismo miércoles.
De hecho, ha avisado de que Vox no tendrá ningún contacto con el Gobierno fuera del Congreso hasta que Iglesias deje de formar parte del Gobierno, ya que ven al líder de Podemos como "una amenaza para la unidad y la convivencia" de España.
Pero además, Abascal ha puesto el foco en la necesidad de evitar la destrucción del tejido económico que, según ha advertido, "lleva a las cartillas de racionamiento". Para ello ha insistido en su propuesta de que el Gobierno asuma el pago de las nóminas de todos los trabajadores y autónomos "a los que impide ir a sus puestos de trabajo".
"España tiene el mayor número de muertos por millón de habitantes del mundo. Tenemos que detener esta tragedia, y lo haremos a pesar del Gobierno y de sus socios", ha aseverado.