MADRID, 4 Nov. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades cubanas se han remitido a los acuerdos alcanzados en la década de los ochenta con el Ejecutivo socialista de Felipe González --a partir de los cuales, varios países latinoamericanos se comprometieron a acoger a etarras deportados-- después de que la Audiencia Nacional haya solicitado extraditar al etarra residente en la isla José Ángel Urtiaga.
Esta es la respuesta que han dado a Europa Press fuentes diplomáticas cubanas, que avanzaron que este será el argumento que esgrimirá la isla en relación al caso de Urtiaga, reclamado por España en la causa que investiga la supuesta colaboración entre ETA, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Gobierno de Venezuela.
En concreto, Urtiaga, alias 'Josean', 'Garrutxu' o 'Tobaneku', está acusado de actuar como máximo responsable del colectivo de etarras en Cuba entre 1984 y 1998 y de dirigirse a la banda terrorista en dos cartas en las que solicitaba permiso para que integrantes de esta organización "experimentaran" en Venezuela con artefactos explosivos.
Las misivas, que incluían también información sobre la situación del colectivo etarra en la isla, fueron incautadas en marzo de 1999 en París a los dirigentes de ETA José Javier Arizcuren Ruiz, 'Kantauri', José Ignacio Herrán Bilbao y Jon Mirena Sampedro Blanco.
ARGUMENTOS DE ESPAÑA
A la espera de la respuesta definitiva que pueda emitir la isla, el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco ya ha propuesto al Gobierno que solicite a Cuba la extradición por la comisión de un delito de colaboración con banda armada.
El juez invoca el Tratado de Extradición entre España y la República de Cuba, firmado en 1905, y recuerda que el mes de febrero se dictó orden de busca y captura contra el miembro de la banda terrorista. Añade que ha tenido conocimiento reciente del domicilio de Urtiaga en La Habana.
Velasco destaca que los compromisos internacionales adoptados por el Gobierno cubano después de 1905 --año en el que aún no estaba tipificado el delito de terrorismo-- obligarían a las autoridades de La Habana a responder positivamente a la solicitud. "La colaboración entre ETA y las FARC ha posibilitado la confección y mejora de nuevos explosivos usados por ambas bandas terroristas", pone de manifiesto el juez.
El auto hace también referencia a la firma por parte de Cuba del Convenio Internacional para la Represión de los Atentados Terroristas Cometidos con Bombas en 1997, que serviría de respaldo para la entrega de Urtiaga.
Velasco ha citado a declarar para el próximo 14 de diciembre a Urtiaga y el también miembro de ETA Arturo Cubillas Fontán para que declaren como procesados en la causa en la que se investiga la supuesta colaboración entre ETA y las FARC.
El magistrado rechazó la personación de los dos etarras en la causa en la que están procesados, lo que les impedirá acceder a las diligencias contenidas en el sumario. El instructor sostiene que Cubillas y Urtiaga se encuentran "en situación de sustracción a la acción de la justicia y en búsqueda y captura", ya que al no haberse "presentado personalmente" ante el juez, incumplen "el principio de sujeción al procedimiento" que contempla la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LECRIM), que en su artículo 118 establece que "toda persona a la que se le impute un hecho punible podrá ejercer el derecho de defensa".
José Ángel Urtiaga Martínez de 54 años fue deportado a Cuba después de formar parte del "comando Gorbea" en el que participa, entre 1978 y 1981, en el ametrallamiento de la comisaría de Policía de Santurce, en los asesinatos de Alfredo Ramos Vázquez, propietario del 'Bar Stadium', de Baracaldo, en el del candidato de Alianza Popular Vicente Zorita Alonso, y en el de un ingeniero de la central nuclear de Lemoniz.
Posteriormente se integra en el "comando Madrid" y participa en la voladura de la central telefónica de la calle Ríos Rosas y en el secuestro de Diego Prado y Colón de Carvajal, junto con etarras deportados en la República Dominicana, Ignacio Aracama Mendía, alias 'Pakito' (actualmente en prisión) y Belén González (en libertad desde finales de 2009 a causa de una grave enfermedad).