Publicado 12/11/2021 20:53

Etiopía.- EEUU sanciona al Ejército y al partido gobernante de Eritrea por su papel en el conflicto de Etiopía

Archivo - Desplazados internos alojados en una escuela secundaria de Mekelle, en Tigray
Archivo - Desplazados internos alojados en una escuela secundaria de Mekelle, en Tigray - OIM ETIOPÍA - Archivo

AI denuncia una nueva oleada de detenciones étnicas en Adís Abeba

MADRID, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -

Estados Unidos ha anunciado este viernes nuevas sanciones contra el Ejército y el partido gobernante de Eritrea, así como diversas personas y entidades del país africano, por su papel en el conflicto en Etiopía, ya que "están contribuyendo a la violencia, socavando la estabilidad y la integridad del Estado etíope con un desastre humanitario como resultado".

El Departamento del Tesoro ha comunicado esta nueva ronda de sanciones para subrayar que Estados Unidos "seguirá utilizando todas sus herramientas y autoridades para apuntar y exponer a aquellos cuyas acciones prolongan la crisis en la región, donde cientos de miles están sufriendo".

"Las partes en conflicto deben sentarse a la mesa de negociaciones sin condiciones previas. Estados Unidos está listo para emprender acciones adicionales, incluso contra el Gobierno de Etiopía y el Frente de Liberación Popular de Tigray (TPLF), si no hay un progreso tangible hacia el cese de las hostilidades", ha avisado la directora de la Oficina de Control de Activos Extranjeros, Andrea M. Gacki.

En este contexto, Washington ha denunciado que el Ejército eritreo "ha estado operando en el norte de Etiopía en medio de numerosos informes de saqueos, agresiones sexuales, asesinatos de civiles y bloqueo de la ayuda humanitaria", mientras que el Frente Popular para la Democracia y la Justicia, que es el único partido político legal de Eritrea, y su presidente, Isaias Afwerki, quien "supervisa personalmente el mando y el control del Ejército, emitiendo órdenes directamente a los generales, haciéndolo responsable en última instancia del papel de las Fuerzas Armadas en la contribución a la crisis en el norte de Etiopía".

También han sido sancionados Abraha Kassa Nemariam, jefe de la Oficina de Seguridad Nacional de Eritrea; la empresa Hidri Trust, relacionada con todas las empresas del partido; y Hagos Ghebrehiwet W Kidan, el asesor económico de la formación.

"La presencia desestabilizadora de Eritrea en Etiopía está prolongando el conflicto, planteando un obstáculo significativo para el cese de las hostilidades y amenazando la integridad del estado etíope", ha lamentado, por su parte, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken.

Blinken ha condenado los "horribles relatos que implican a las fuerzas eritreas en graves abusos contra los Derechos Humanos. (...) Las fuerzas eritreas deben retirarse inmediatamente de Etiopía", ha instado.

NUEVA OLEADA DE DETENCIONES ÉTNICAS

Precisamente este viernes, Amnistía Internacional ha denunciado una nueva oleada de detenciones por motivos étnicos en Adís Abeba, con las fuerzas de seguridad de la capital etíope "atacando a los tigriños, incluidos niños y ancianos, con detenciones arbitrarias y masivas en el marco de una escalada de la represión". "La mayoría de los detenidos están recluidos sin cargos ni acceso a un abogado", ha alertado la organización.

Según AI, las detenciones se han intensificado desde que el gobierno declaró el estado de excepción hace 10 días. Las detenciones se llevan a cabo mediante registros domiciliarios por parte de las fuerzas de seguridad, con el apoyo de grupos de vigilancia que comprueban las identificaciones de las personas en la calle. Entre los detenidos se encuentran funcionarios, sacerdotes ortodoxos y un abogado, ha contado la ONG.

"Estas detenciones masivas han infundido un clima de miedo tal que los ciudadanos que proceden de Tigray con los que ha hablado Amnistía Internacional temen que puedan ser detenidos en cualquier momento", ha denunciado el director del Programa de Amnistía Internacional para África Oriental y Meridional, Deprose Muchena, quien ha avisado de que "las personas actualmente encerradas no han sido acusadas ni han comparecido ante un tribunal, y muchas de ellas han sido seleccionadas únicamente por su origen étnico".