MADRID, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) ha reclamado a la comunidad internacional, y especialmente a la europea, que adopte medidas "urgentes" para evitar tragedias como la vivida esta semana frente a las costas de Libia, donde habrían perdido la vida hasta 130 migrantes y refugiados por un nuevo naufragio.
Estas personas viajaban a bordo de un bote de goma que había partido desde la zona de Al Joms, cerca de la capital libia, y supuestamente naufragó debido al mal tiempo, que también ha puesto en peligro a otras embarcaciones que intentaban cruzar la zona central del Mediterráneo con el objetivo de alcanzar las costas del sur de Europa.
La OIM y ACNUR han señalado en un comunicado conjunto que la última tragedia es la más mortífera de la que se tiene constancia en la zona en lo que va de año y se suma a los "al menos 300" fallecidos registrados hasta ahora. "Es un incremento significativo en comparación con el mismo periodo del año pasado, cuando unas 150 personas se ahogaron o desaparecieron en la misma ruta", han lamentado.
Por este motivo, y ante la previsión de que más migrantes decidan emprender el "peligroso" viaje a medida que mejora la climatología y empeoran las condiciones de vida en Libia, creen que es momento de que haya "pasos urgentes" por parte de la comunidad internacional.
Las dos agencias han propuesto una reactivación de las operaciones de búsqueda y rescate en el Mediterráneo --dependientes en gran medida de las actividades de las ONG--, una mayor coordinación entre todos los actores implicados, el fin de las devoluciones a puertos que no sean considerados seguros y el establecimiento de un mecanismo "seguro y predecible" para los desembarcos de migrantes.