Publicado 20/08/2022 23:08

El ex primer ministro de Pakistán Imran Jan pide el apoyo militar tras denunciar abuso policial a su asesor principal

Archivo - El primer ministro de Pakistán, Imran Jan
Archivo - El primer ministro de Pakistán, Imran Jan - Pradeep Dambarage/ZUMA Wire/dpa - Archivo

El exprimer ministro de Pakistán Imran Jan ha pedido este sábado el respaldo del Ejército tras denunciar abusos policiales contra su principal asesor, Shahbaz Gill, de quien ha llegado a asegurar que fue víctima de abusos sexuales bajo custodia en un caso de presunta sedición.

"Quiero decir a los 'neutrales'", ha declarado esta noche Jan en referencia al Ejército, una fuerza enormemente influyente en Pakistán a pesar de que se declara independiente del desarrollo político del país, "que estamos ante un asunto de interés nacional, y que es importante que nos apoyen a nosotros y a la justicia, y no a estos ladrones del Gobierno".

Jan ha insinuado durante su discurso que la Policía obedecía "órdenes de arriba" en sus presuntas torturas contra Gill. "Cada vez que les hemos preguntado nos decían que no tenían culpa de nada, que les dieron patadas en el culo para que siguieran las órdenes", ha manifestado el ex primer ministro en su comparecencia, recogida por el diario 'Dawn'.

El exmandatario, expulsado del poder tras una moción de censura que, según él, fue fruto de una conspiración estadounidense, se mostró incluso más crítico el pasado viernes sobre la situación de Gill. "Todas las fotos y videos muestran claramente que Gill fue torturado mental y físicamente, incluso abuso sexual", denunció en su cuenta de Twitter.

La ministra de Información del país, Marriyum Aurangzeb, criticó este sábado las declaraciones de Jan, a quien acusó de hacer un ejercicio de "falsa propaganda", antes de asegurar que el asesor está "perfectamente bien".

"No ha habido violencia y los videos que se comparten en las redes sociales son falsos", ha aseguradon Aurangzeb, antes de agregar los vídeos que circulan en las redes sobre las supuestas torturas son en realidad los de un hombre acusado de violación y no Gill, arrestado el 9 de agosto por presuntamente incitar a un motín entre las Fuerzas Armadas.