Publicado 13/05/2019 15:43

La familia del jefe de despacho de Guaidó logra verlo más de 50 días después de su detención por el SEBIN

La defensa del jefe de despacho de Guaidó denuncia que es víctima de "un caso bien incongruente"
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   MADRID, 13 May. (EUROPA PRESS) -

   La familia de Roberto Marrero, el jefe de despacho del autoproclamado "presidente encargado" de Venezuela, Juan Guaidó, ha anunciado en las últimas horas que finalmente ha logrado verlo, más de 50 días después de que fuera detenido por el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN).

   "Hoy, 12 de mayo, después de 52 días secuestrado en el Helicoide, a mi esposo, Roberto Marrero, se le permitió su visita familiar", anunció el domingo su mujer, Romy Moreno, a través de Twitter. "Pudimos constatar que está bien y firme. Les manda a decir ¡Dios los bendiga!", ha añadido.

   Marrero fue detenido la madrugada del 21 de marzo en su vivienda de Caracas. Agentes del SEBIN se lo llevaron a una de sus sedes en Caracas, el Helicoide, acusado de dirigir "una célula terrorista" que pretendía "desestabilizar" la nación caribeña.

   El dirigente opositor ha pasado la mayor parte de su reclusión incomunicado, según han denunciado sus abogados. El 27 de marzo, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) pidió al Estado venezolano que adoptara las medidas necesarias para garantizar su integridad física y su vida.

   Guaidó ha interpretado la detención de Marrero, a quien considera un "amigo personal" además de un estrecho colaborador, como un ataque directo a su círculo cercano. La Justicia venezolana también ha actuado contra varios diputados, incluido el vicepresidente de la Asamblea Nacional.

   El mandatario interino es objeto de dos investigaciones por parte de la Fiscalía General: una por autoproclamarse "presidente encargado" y otra por supuestas irregularidades financieras. Por ahora, se han dictado medidas cautelares en su contra pero no hay orden de detención.

   La crisis política en Venezuela se agravó el 10 de enero, cuando Nicolás Maduro decidió iniciar un segundo mandato de seis años que no reconocen ni la oposición ni buena parte de la comunidad internacional porque consideran que las elecciones presidenciales del 20 de mayo fueron un fraude.

   En respuesta, Guaidó se autoproclamó mandatario interino el 23 de enero con el objetivo de cesar la "usurpación", crear un gobierno de transición y celebrar "elecciones libres". Estados Unidos, la mayoría de los países latinoamericanos y numerosos europeos, entre ellos España, le han reconocido.