BOGOTÁ, 10 Abr. (Notimérica) -
La detención este lunes del antiguo cabecilla de la extinta guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) Jesús Santrich, acusado de delitos relacionados con el narcotráfico, pone en duda lo que pasará con el escaño que ostentaba en el Congreso después del Acuerdo de Paz.
El acuerdo alcanzado en La Habana entre las FARC y el Gobierno colombiano efectivamente otorga al partido político surgido de la guerrilla cinco escaños en el Congreso de la nación durante dos periodos constitucionales.
Este número de escaños podría haber sido mayor pero la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común no consiguió el número de votos necesario para ampliarlo. De estos cinco representantes que obtuvo la FARC en el Congreso, Santrich era uno de ellos.
ARTÍCULO 134
El problema viene ahora ya que, tal y como informan desde el diario 'El Tiempo', el Artículo 134 de la Constitución colombiana señala que los representantes del Congreso sólo podrán ser sustituidos por faltas absolutas o temporales.
Sin embargo, este artículo señala también que aquellos que sean condenados por delitos de lesa humanidad, pertenencia a grupos armados, actividades en contra de la administración pública o hechos relacionados con actividades de narcotráfico --los que ahora enfrenta Santrich--, "no podrán ser reemplazados".
Algo similar dice la ley que regula el funcionamiento de los partidos políticos en el país sudamericano. El artículo 10 de esta norma señala que incurrir en delitos como el narcotráfico podría suponer sanciones, entre ellas la denominada "silla vacía".
Esta ley señala además que los partidos y movimientos políticos también podrían responder por el aval dado a los candidatos en caso de que estos fueran condenados por hechos cometidos antes de la formalización del citado aval. Esto abriría la puerta al Consejo Nacional Electoral (CNE) para deslegitimar a la FARC.
Esto podría ser posible a pesar de la situación especial en la que se encuentra este partido debido a lo acordado en el acto legislativo 3 del Procedimiento Legislativo Especial para la Paz que señala que, a pesar de su estatus diferenciado, el partido FARC habrá de estar sujeto a las mismas posibles sanciones que el resto.
POSIBILIDADES DE CONSERVAR SU ESCAÑO
Otras voces del país señalan que, por el momento, no se podría retirar a Santrich de su posición debido a que el propio CNE todavía no ha entregado las actas de congresista. Además, también se apunta que habría que esperar a que el exguerrillero fuera efectivamente condenado para poder sancionarle.
Por su parte, el profesor de derecho constitucional de la Universidad Nacional Andrés Abel Rodríguez, consultado por el citado diario 'El Tiempo', señala que sanciones como la "silla vacía" sólo podría aplicarse en el caso de que la FARC hubiera obtenido más de cinco asientos ya que, arrebatarle uno de esos cinco podría suponer incumplir los acuerdos de paz. En este escenario, el partido podría sustituir a Santrich por otro representante.