MADRID, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
El fiscal jefe del Tribunal Penal Internacional (TPI), Karim Khan, confía que la investigación abierta sobre la guerra contra las drogas en Filipinas permita "descubrir la verdad" y garantizar la rendición de cuentas ante los abusos que supuestamente han cometido las fuerzas de seguridad bajo mando del presidente, Rodrigo Duterte.
El TPI accedió a mediados de septiembre a la petición de la Fiscalía para examinar estos abusos, asumiendo que la guerra contra las drogas no puede catalogarse como una ofensiva policial "legítima", al igual que tampoco deberían entenderse como "simples excesos" las muertes registradas.
El Gobierno filipino admite más de 6.000 fallecidos en sus polémicas redadas, aunque las organizaciones defensoras de los Derechos Humanos coinciden en que la cifra podría real podría ser hasta cuatro o cinco veces más.
Khan ha reafirmado su compromiso para llevar a cabo una investigación "exitosa, independiente e imparcial", con vistas a "llevar justicia a las víctimas y a las comunidades afectadas". Espera una colaboración "constructiva" con las autoridades locales, si bien Filipinas ya no es Estado parte del TPI.
Duterte rompió con el Estatuto de Roma en marzo de 2019 --a raíz precisamente de las pesquisas en ciernes--, por lo que la Fiscalía de la corte con sede en La Haya se centrará en examinar si pudieron cometerse crímenes antes de esa fecha. El tribunal entiende que hay indicios "razonables" para entender que pudieron haberse cometido crímenes contra la humanidad.