MADRID, 5 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, ha percibido un aumento de su popularidad a pesar de que el país ha registrado el peor brote de coronavirus del sureste asiático.
Según una encuesta de Pulse Asia, la popularidad del mandatario filipino ha aumentado del 87 por ciento al 91 por ciento desde el pasado mes de diciembre en plena pandemia de coronavirus.
El nivel de confianza que muestra la población en su Gobierno también se encuentra en torno al 90 por ciento --mientras que era de un 83 por ciento en diciembre--.
El futuro político de Duterte depende actualmente de los rebrotes, la gestión y la progresión de la pandemia de coronavirus en el país, que se ha convertido en el más golpeado por el virus de la región.
Desde que comenzó la pandemia Filipinas ha constatado más de 324.000 casos de COVID-19, con una economía sumida en una fuerte contracción. En total han fallecido 5.840 personas a causa de la pandemia, si bien otras 273.123 han logrado recuperarse.