MADRID, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Policía de Francia ha desmantelado este martes un campamento que albergaba a unos mil migrantes en la localidad de Grande-Synthe, en el norte, en plena tensión entre París y Londres en torno a la cuestión migratoria.
El ministro del Interior francés, Gérald Darmanin, ha informado de que ha ordenado la evacuación y ha extendido a través de la red social Twitter su agradecimiento a la Policía, los gendarmes y los agentes de la Prefectura Norte por su labor.
La Prefectura Norte ha detallado que el campo evacuado es "el principal" de Grande-Synthe y alberga "a unas mil personas". El alcalde de la localidad, Martial Beaert, ha cifrado el número de migrantes que vivían en la zona, en su mayoría kurdos, en 1.500.
La evacuación, según recoge BFMTV, se ha llevado a cabo sin incidentes. Las familias con niños y bebés han sido evacuadas a primera hora en autobuses, desde donde serán trasladados a otros alojamientos, mientras que los equipos de limpieza han entrado después.
Durante años, los migrantes han acudido en masa a la costa de Grande-Synthe o Calais con la esperanza de cruzar a Reino Unido, aunque los desmantelamientos de este tipo de campos son frecuentes. La presión migratoria no cesa en la zona y, según Reino Unido, 22.000 migrantes han ingresado en el país en embarcaciones desde principios de año.
Debido a las altas cifras de migrantes que llegan a Reino Unido, las autoridades británicas han presionado a las francesas para que eviten que se establezcan en estos territorios con la idea de cruzar después a Reino Unido.
Las autoridades de Londres y París se acusan una a otra por el aumento de las cifras. Reino Unido acusa a Francia de tener a pocos agentes en sus costas, mientras que Francia dice que las leyes laborales británicas atraen a los refugiados, recuerda la agencia DPA.
Además, el Gobierno británico ha implementado un sistema de inmigración muy rígido tras el Brexit. La ministra del Interior británica, Priti Patel, quiere que a los migrantes les resulte más difícil solicitar asilo a su llegada al país europeo.