BOGOTÁ, 20 Feb. (Colprensa/EP) -
El vicepresidente de Colombia, Angelino Garzón, ha respondido este lunes a la propuesta de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y ha advertido de que sólo dialogarán si los rebeldes ponen fin a las acciones terroristas y liberan a todos los secuestrados que tienen en su poder.
Garzón ha reconocido que no ha leído aún la carta que envió el ELN a la organización Colombianos y colombianas por la paz (CCP) --que dirige la exsenadora colombiana Piedad Córdoba-- en las que proponen una "mesa de diálogo" para "superar definitivamente el conflicto" armado, sin embargo, ha sido enfático al insistir en que cualquier propuesta pasa por el cese de las hostilidades.
Según Garzón, para poder proponer un diálogo de paz es necesario que la guerrilla cumpla con "dejar libertad incondicional de todos los secuestrados, cesar las prácticas del terrorismo, el secuestro y el narcotráfico, así como la plantación de minas antipersona".
"El Gobierno no va a repetir experiencias pasadas", ha advertido al referirse a la llamada "zona de distensión" que delimitó en 1998 el entonces presidente, Andrés Pastrana, y que comprendía un área de 42.000 kilómetros cuadrados que abarcaban parte de los departamentos de Meta y Caquetá, el cual sirvió de escenario para las fallidas conversaciones que sostuvo con la guerrilla.
Garzón ha asegurado que el Gobierno de Juan Manuel Santos "está dispuesto a escuchar y a construir caminos de paz y reconciliación", en caso de que cualquier grupo armado ilegal decida dejar la violencia, dado que "éste es un mensaje que espera Colombia".
En este contexto, el vicepresidente habló sobre la eventual liberación de seis rehenes en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y ha reiterado que el gobierno pide "hechos de paz, no palabras de paz".