MADRID, 26 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Kenia está contemplando la posibilidad de iniciar operación política para exigir a los países occidentales que sancionen al líder de la oposición, Raila Odinga, acusado por el presidente del país, William Ruto, de perpetrar constantes maniobras de desestabilización al rechazar su derrota en las elecciones presidenciales y llamar constantemente a la movilización popular contra las autoridades.
Concretamente, la Administración Ruto no descarta a los países occidentales que impidan la entrada a Odinga y adopten medidas contra los activos del líder opositor en el extranjero, según fuentes próximas a la iniciativa al diario keniano 'The Nation'.
Este pasado miércoles, Odinga, ex primer ministro del país, dio al Gobierno un ultimatum de dos semanas para cambiar el funcionamiento de la Comisión Electoral Independiente del país, o de lo contrario impulsará una ola de protestas multitudinarias.
Las elecciones acabaron dilucidadas por el Tribunal Supremo de Kenia, que acabó avalando la victoria de Ruto en las elecciones de agosto del año pasado, con un dictamen respaldado por unanimidad por los siete magistrados que conforman la corte. Odinga rechazó categóricamente el veredicto.
Oficialmente, el Gobierno ha rechazado por el momento cualquier medida contra Odinga, según el secretario de Estado Asuntos Exteriores y de la Diáspora, Alfred Mutua. "El Gobierno no tiene tiempo para enredarse en el interminable teatro político del señor Odinga. No estamos en una caza de brujas. Si quiere manifestarse, que lo haga", ha añadido al diario keniano.
Sin confirmar los planes contra Odinga, el senador Samson Cheragei ha pedido la retirada al ex primer ministro de cualquier privilegio internacional del que pudiera disfrutar todavía a tenor de su pasado cargo al frente del Gobierno keniano.
"'Tinga' (Odinga) debería perder todos los privilegios que se le otorgaron a nivel local e internacional dado su antiguo cargo de primer ministro. La comunidad internacional, por norma, impone restricciones a las personas que fomentan conflictos civiles contra gobiernos legítimos", ha declarado.
"Uno no se gana el respeto de la comunidad internacional intentando provocar una guerra civil", añade por su parte el adjunto al líder de la mayoría en la Asamblea Nacional, Owen Baya, quien recordó el caso del ex presidente de Zimbabue, Robert Mugabe. "Era un demócrata respetado, pero cuando comenzó a socavar los mismos principios democráticos, la comunidad internacional impuso duras sanciones en su contra".
"Raila se ha ganado un nombre por ser demócrata. Pero si comienza a comportarse como un rebelde, pediremos a la comunidad internacional que le castigue", ha avisado.