MADRID, 20 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Pakistán ha afirmado este martes que contactará con las autoridades de Grecia para abordar la tragedia registrada la semana pasada frente a las costas del país europeo, donde cerca de 500 personas murieron o fueron dadas por desaparecidas tras el hundimiento de un pesquero con cientos de migrantes.
El ministro del Interior de Pakistán, Rana Sanaulá, ha señalado que Islamabad espera poder tratar con Atenas la conducta de la Guardia Costera durante el incidente, que tuvo lugar frente a las costas de Pylos, en la región de Peloponeso (sur), después de que saliera a la luz que cientos de los ocupantes de la embarcación tenían nacionalidad paquistaní.
Asimismo, ha confirmado en declaraciones concedidas a la cadena de televisión paquistaní Geo TV que hay una investigación "sobre el tráfico de personas" en el país, después de que las fuerzas de seguridad detuvieran el lunes a una persona que supuestamente era parte de la red de traficantes que envió hacia Europa a decenas de víctimas.
"A menudo, los culpables zanjan los casos pagando a las víctimas", ha manifestado Sanaulá, que ha añadido que el detenido habría recibido cifras de entre dos y 2,5 millones de rupias (entre 6.370 y 7.965 euros) por cada persona que se embarcó en la travesía.
Según el relato de supervivientes al diario británico 'The Guardian', no se permitía estar en cubierta a personas de ciertas nacionalidades, como los paquistaníes, por lo que sus posibilidades de sobrevivir eran mucho menores. Además afirmaron que las mujeres y niños fueron obligados también a viajar en la bodega del barco.
Las autoridades de Grecia sostienen que el buque rechazó cualquier tipo de ayuda y sostenía que no estaba en riesgo hasta poco antes de volcar, pero los datos analizados por la cadena británica BBC a partir del portal MarineTraffic parecen revelar problemas de navegación, en medio de las crecientes críticas a la Guardia Costera por su actitud durante el siniestro.