ATENAS, 26 Nov. (DPA/EP) -
La Policía de Grecia ha detenido a tres presuntos traficantes de personas migrantes y está buscando a otros 17 presuntos cómplices que ayudaban a cruzar la frontera europea desde Turquía a Grecia a través del río Evros.
Según las autoridades griegas, los traficantes, que al parecer proceden de distintos países, han trasladado sistemáticamente a migrantes y solicitantes de asilo desde Turquía a Grecia a través del río Evros, una frontera exterior de la Unión Europea.
En este contexto, la Policía griega ha explicado que tras cruzar la frontera, los migrantes eran recogidos por miembros de la banda y conducidos al oeste de Grecia en vehículos alquilados para llegar desde allí a Europa central.
Los migrantes debían pagar entre 2.000 y 3.000 euros por persona para poder acceder a Europa de forma ilegal.
Cuando llegan a territorio heleno, los migrantes solicitan asilo en el país de la UE al que se dirigen y no pueden ser devueltos a Grecia porque no están registrados oficialmente en la base de datos europea de huellas dactilares Eurodac.
Miles de personas tratan de llegar a Europa a través del Mediterráneo, la mayoría de ellos procedentes de países del norte de África, Asia u Oriente Próximo. Sin embargo, Grecia ha acusado en numerosas ocasiones a Turquía de facilitar el paso de estos migrantes hacia suelo griego a pesar del acuerdo migratorio alcanzado en 2016 con la Unión Europea.
La tensión entre ambos países aumentó en 2020, cuando Turquía abrió su frontera para dar paso a los migrantes, lo que provocó el despliegue de la Policía y el Ejército por parte de Grecia para mitigar lo que el Gobierno consideró como un "ataque híbrido". Los dos países mantienen además varias disputas en el Mediterráneo oriental.