Publicado 18/08/2015 19:06

Hillary Clinton se opone a perforar el Ártico


WASHINGTON, 18 Ago. (Reuters/EP) -

La posible candidata demócrata a las elecciones presidenciales de Estados Unidos, Hillary Clinton, ha manifestado este martes su oposición a la exploración petrolífera del Ártico, un día después de que la Administración Obama le diera a Royal Dutch Shell su aprobación final para perforar Alaska.

"El Ártico es un tesoro único", ha escrito Clinton en Twitter. "Dado lo que sabemos, no merece la pena el riesgo de perforarlo", ha añadido. Este lunes el Gobierno de Estados Unidos le ha dado a Shell el visto bueno para continuar la perforación en la zona petrolífera frente al norte de Alaska por primera vez desde 2012.

La explotación petrolífera del Ártico se ha convertido en un asunto polémico en la campaña presidencial debido a que hay más concesiones programadas para 2016 y 2017.

Shell obtuvo los permisos durante el mandato del expresidente George W. Bush. En 2012, sufrió una serie de contratiempos en el Ártico, incluyendo la pérdida de control de una torre petrolífera por la que los buceadores de la Guardia Costera tuvieron que bajar desde helicópteros para rescatar a 18 miembros del equipo.

No obstante, la empresa ha comentado que el petróleo del Ártico, el cual no podría producirse en al menos una década, es necesario ante el aumento de la demanda global.

Los ecologistas se oponen a la perforación, asegurando que cualquier vertido podría dañar a morsas, ballenas y osos polares en una región que los científicos consideran que ya está siendo afectada por el cambio climático.

El Ártico contiene el 20 por ciento del petróleo y del gas sin descubrir del mundo, según las investigaciones del Gobierno de Estados Unidos, lo que lo convierte en una codiciada fuente de recursos.

Sobre otros asuntos energéticos, Clinton ha intentado equilibrar las preocupaciones medioambientales y económicas y ha dicho que si se convierte en presidenta, intentará eliminar gradualmente las extracciones de combustibles fósiles y aumentar los impuestos a las empresas que operan en propiedades públicas para no perturbar la economía.

Sin embargo, Clinton no se ha pronunciado sobre si aprobará el oleoducto Keystone XL desde Canadá, un asunto sobre el que Obama aún no ha emitido ninguna declaración.