MADRID, 30 Ene. (EUROPA PRESS) -
El campamento militar situado en la localidad maliense de Sokolo fue atacado nuevamente por yihadistas durante la jornada del miércoles, tres días después de un asalto que se saldó con la muerte de al menos 20 gendarmes.
Fuentes citadas por la emisora local Studio Tamani han apuntado que los yihadistas atacaron un puesto de control de la Gendarmería, situado en Sarakala, a 15 kilómetros de Sokolo, antes de asaltar nuevamente el citado campamento.
Testigos han indicado que "más de 50 hombres armados" participaron en el ataque y han agregado que los residentes en Sokolo "se encerraron en sus casas durante toda la noche". Por el momento no hay informaciones sobre víctimas mortales.
La autoría del ataque perpetrado el domingo contra el campamento de Sokolo, situado cerca de la frontera con Mauritania, fue reclamada por la coalición yihadista Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes, rama de Al Qaeda en Malí.
El primer ministro de Malí, Boubou Cissé, ha anunciado este mismo el próximo reclutamiento de 10.000 soldados para reforzar la presencia del Ejército en todo el país, en un momento en que los grupos yihadistas han intensificado sus acciones.
Por otra parte, Cissé anunció que las Fuerzas Armadas malienses (FAMa) regresarán en las próximas semanas a Labbezanga, con un efectivo más importante y medios adecuados con el fin de poder garantizar la seguridad de la población.
La localidad de Labbezanga, situada a 200 kilómetros de Gao, albergaba el principal puesto de seguridad en la frontera entre Malí y Níger pero las autoridades ordenaron el repliegue de los efectivos destinados en el mismo a Ansongo a mediados de noviembre pasado.
Malí ha venido registrando en los últimos meses un número creciente de ataques yihadistas obra tanto de la filial de Al Qaeda en la región como de la de Estado Islámico, lo cual ha hecho además aumentar la violencia intercomunitaria y provocado el desplazamiento de decenas de miles de personas.