TEGUCIGALPA, 9 Abr. (EUROPA PRESS) -
Estados Unidos y Honduras inauguraron este viernes una base naval en una población del Caribe, cerca de la frontera con Nicaragua, para actividades relacionadas con la lucha contra el narcotráfico, en la que Washington invirtió dos millones de dólares (1,4 millones de euros), donó cuatro embarcaciones y facilitó asesores.
La base militar de Caratasca está ubicada en una zona aislada llamada La Mosquita, del departamento de Gracias a Dios (este). El presidente hondureño, Porfirio Lobo, ha asegurado que las actividades que se desarrollen "van a contribuir a que podamos estrechar de una manera más efectiva la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado".
"Esta instalación posee una presencia estratégica y táctica para impulsar la ubicación del trasiego de droga a lo largo de toda la costa noreste de Honduras", explicó Llorens.
El embajador de Estados Unidos en Honduras, Hugo Llorens, explicó que las instalaciones tendrán un centro de operaciones, oficinas, dormitorios para las tropas y un muelle para las pequeñas embarcaciones.
Estas edificaciones forman parte de un convenio que firmó hace un año el entonces presidente Manuel Zelaya con la Casa Blanca como parte de las estrategias que buscan reducir el tráfico de droga en Centroamérica, región que sirve de camino a la droga que sale desde Sudamérica con destino a Estados Unidos.
La coordinación de la base militar estará a cargo de la Fuerza Naval de Honduras, aunque contarán con la asesoría de oficiales del Comando Sur del Ejército norteamericano, informó la prensa local.
Washington también cuenta en Honduras con la base aérea Coronel Soto Cano, en Palmerola, en el departamento de Comayagua (centro), considerada uno de los tres puntos estratégicos de Estados Unidos en esa región.