TEGUCIGALPA, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -
Xiomara Castro, la esposa del derrocado presidente de Honduras, Manuel Zelaya, apareció hoy por primera vez en público para encabezar las manifestaciones que se están realizando en Tegucigalpa contra el golpe de Estado que instauró un Gobierno 'de facto' liderado por Roberto Micheletti.
Castro hizo un llamamiento a los hondureños a mantener la resistencia pacífica y aclaró que no están dispuestos a negociar el retorno de Zelaya al poder, porque su esposo sigue siendo el presidente constitucional de Honduras y eso es "innegociable".
La marcha, que comenzó en la mañana en la Universidad Pedagógica y tiene como destino la Casa Presidencial, forma parte de las manifestaciones que desde hace más de una semana realizan los simpatizantes de Zelaya y que han generado fuertes confrontaciones con uniformados, con un saldo de dos personas muertas y varios heridos.
La ex primera dama ha sido rodeada por miles de personas que decían consignas en contra de Micheletti y exigiendo del regreso de Zelaya, quien ha sido reconocido por la comunidad internacional como el único presidente constitucional de Honduras.
"Quiero pedirles que sigamos manifestándonos y que no tengamos miedo a nada", expresó Castro a los medios locales minutos antes de iniciar la marcha hacia el palacio de Gobierno, al destacar que "no era justo que yo me estuviese refugiando, mientras hombres y mujeres arriesgan sus vidas".
De esta manera, Castro lamentó la muerte de dos personas en las manifestaciones del pasado domingo frente al aeropuerto de Toncontín, en Tegucigalpa, cuando miles de personas esperaban el regreso de Zelaya, quien finalmente no pudo tocar sueño hondureño por una prohibición del Gobierno 'de facto'.
"¿Cómo puede haber paz si se persigue al pueblo, si la gente no puede salir de sus comunidades, si hay toque de queda y suspensión de las garantías, se preguntó la esposa del presidente?", se preguntó Castro.