TEGUCIGALPA, 4 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Honduras, Porfirio Lobo, firmó este martes el decreto para instalar la llamada Comisión de la Verdad que se encargará de esclarecer los hechos relacionados con el golpe de Estado que el pasado 28 de junio expulsó del Gobierno al entonces presidente Manuel Zelaya y dio lugar a una grave crisis política.
El grupo de trabajo está presidido por el que fuera vicepresidente y ministro de Exteriores de Guatemala, Eduardo Stein, e integrado por el diplomático canadiense, Michael Kergin, y la jurista peruana, María Zavala, como representantes internacionales, así como por la rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos; el ex rector de la misma, Jorge Casco; y el secretario técnico, Sergio Membreño; pertenecientes al ámbito nacional.
El político guatemalteco se comprometió a investigar los acontecimientos que precedieron el golpe de Estado, todos los hechos relacionados con el mismo y el mandato del Gobierno interino liderado por Roberto Micheletti sin excluir de estas pesquisas a ninguno de los sectores de la sociedad hondureña.
"Haremos nuestro trabajo sin exclusiones. No pretendemos hacer listados exclusivos de personas a las que se puede entrevistar. No queremos excluir a nadie, ni queremos excluir ningún tema que tenga que ver con lo que se nos ha encomendado", dijo Stein en su discurso.
En este sentido, Stein indicó que la Comisión se ocupará de indagar los antecedentes y consecuencias del golpe más allá de "los hechos visibles", lo que implica investigar violaciones a los Derechos Humanos y actos de corrupción. Con estas palabras el líder del grupo de trabajo quiso aclarar que sus integrantes "no serán meros cronistas" de este episodio, ya que para ello "se podría haber contratado a un historiador".
Asimismo, Stein reconoció que la instalación de la Comisión "no nace en aguas tranquilas" ya que existe una fuerte oposición de determinados sectores al trabajo que está llamada a desempeñar en pro de la reconciliación nacional y de la normalización democrática en el país que desde hace meses persigue el Gobierno de Lobo.
"Desde antes de que comience el trabajo de la Comisión han pretendido descalificarla, o al menos sugerir que fuera una Comisión, como se usa en el lenguaje contemporáneo: 'light'. Que sirva sólo de vitrina para voltear la página, sin consecuencia alguna de lo que pasó", agregó.
PRESENCIA INTERNACIONAL
La ceremonia de instalación de la Comisión de la Verdad se produjo en presencia del Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, y del vicesecretario de Estado adjunto de Estados Unidos para Asuntos del Hemisferio Occidental, Craig Kelly, que llegaron ayer a Tegucigalpa para respaldar el acto.
En referencia a la asistencia de Insulza, el ministro de Exteriores de Honduras, Mario Canahuati, consideró que es "un paso que da a entender la intención de la OEA de restablecer y normalizar las relaciones con Honduras" que quedaron suspendidas a raíz del golpe de Estado.