Actualizado 20/04/2010 21:46

Honduras.- Micheletti califica de "intolerante" la actitud de España y Brasil por no reconocer al Gobierno de Lobo

Dice que no se arrepiente del golpe de Estado porque sino Honduras "estaría a las órdenes del golpista Hugo Chávez"


TEGUCIGALPA, 20 Abr. (EUROPA PRESS) -

El ex presidente interino de Honduras, Roberto Micheletti, calificó de "intolerante" la actitud de países como España y Brasil por negarse a reconocer al Gobierno del actual mandatario, Porfirio Lobo, al considerar que las elecciones en las que se eligió al nuevo Ejecutivo estaban auspiciadas por el régimen 'de facto'.

"Es una injusticia, es una actitud intolerante de parte de ellos. El año pasado fuimos a elecciones, nos costó mucho hacerlas porque Zelaya sólo le dio al Tribunal Supremo Electoral 15 millones de lempiras (592.145 euros) y se ocupaban 600 millones de lempiras (23,6 millones de euros)", dijo Micheletti en una entrevista concedida al diario hondureño 'La Prensa' tras casi tres meses de silencio.

"España salió del franquismo tras una elección después de un golpe de Estado, o lo que haya sido, el caso es que gobernaban los militares. En los ochenta nosotros salimos de un Gobierno militar, nos hemos mantenido en democracia", recordó.

En este sentido reivindicó la transparencia y legitimidad de los comicios del 29 de noviembre e instó a la comunidad internacional a aceptar el nuevo Gobierno y a colaborar con él para devolver la normalidad democrática e institucional al país tras siete meses de crisis política.

"Como gobernante hice lo imposible para que todo terminara como terminó, o sea con elecciones limpias, transparentes y masivas y luego la entrega del poder el 27 de enero tal y como lo ordena la ley tras la sucesión presidencial del 28 de junio", insistió.

DENUNCIA ANTE LA CIDH

En referencia a la denuncia que el ex presidente hondureño Manuel Zelaya presentó ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) exigiendo a Lobo que modifique la Constitución del país centroamericano, retire las órdenes de captura en su contra e indeminice a la totalidad de su Gobierno, Micheletti afirmó que la única intención del ex mandatario es "sacarle dinero al país".

El que fuera presidente 'de facto' consideró que la propuesta de Zelaya de cambiar la Constitución del país centroamericano no tiene ninguna base jurídica. Por su parte, Micheletti apuntó que el propósito del ex mandatario es evitar que la Comisión de la Verdad constituida por el actual dirigente, Porfirio Lobo, juzgue su actuación al frente del país en los meses previos al golpe de Estado.

"La ley es clara, hoy más que nunca conocemos la Constitución, creemos en ella y en aquellos hombres que fueron sabios al momento de redactarla. A mí me gusta leer mucho a algunos constitucionalistas que escriben sobre lo que los diputados constituyentes prevenían cuando la elaboraron", dijo el ex mandatario.

No obstante, Micheletti dudó de que Zelaya fuera el verdadero artífice de esta denuncia y acusó al presidente de Venezuela, Hugo Chávez, de manipular al ex presidente para intentar dominar al país centroamericano y subsumirle dentro de la órbita del llamado movimiento bolivariano. En cambio, el objetivo de Zelaya sería atraer la atención mediática y enriquecerse a costa del empobrecido país.

"Puede que tenga algún efecto internacional como jugada política de Chávez, porque él es el que está detrás de esa denuncia, Zelaya no tiene la capacidad para actuar así, pero en el ámbito nacional estamos claros que la intención de esa denuncia es sacarle dinero al país", indicó.

En consecuencia, Micheletti confesó que no se arrepiente de haber liderado el golpe de Estado que el pasado 28 de junio derrocó al Gobierno de Zelaya porque de no haber sido así "el país ya estaría a las órdenes del golpista Hugo Chávez".

"Jamás me voy a arrepentir de lo que hice porque lo que hice fue lo correcto. Lo que se estaba implantando en este país era la doctrina bolivariana, una doctrina inventada por ese señor de Venezuela que ha utilizado el dinero de su pueblo para sus propios gustos y placeres", aseveró.

En este sentido, el ex presidente interino alertó a los hondureños de los planes de Chávez que, a su juicio, pasan por controlar el país a través de importantes inversiones en materia energética y social que estarían orientadas a influir en las decisiones políticas, especialmente las de proyección regional.

Chávez "fracasó en su primer intento en Honduras, pero va a continuar insistiendo, tiene suficientes dólares y suficiente apoyo internacional para seguir intentando que este país caiga en sus manos; pero no lo vamos a permitir, los hondureños somos demócratas, amamos esta patria y la vamos a defender", afirmó.