TEGUCIGALPA, 25 Mar. (EUROPA PRESS) -
El ex presidente hondureño Manuel Zelaya ha condenado este viernes los "ataques" perpetrados por el Ejército contra maestros que se manifestaban en las calles de Tegucigalpa para exigir mejoras en sus condiciones laborales, ha asegurado que estas acciones forman parte de un "plan macabro" del Gobierno de Porfirio Lobo.
En una carta, Zelaya expresa su apoyo a los manifestantes y critica "los inhumanos ataques al magisterio nacional que tienen el único fin de liquidar los colegios magisteriales y desarticular los movimientos sociales en Honduras".
"Nunca antes se ha ejecutado en nuestro país un plan tan brutal que use tanta alevosía y ventaja para sostener los privilegios de una elite voraz y sanguinaria", señala la misiva enviada por Zelaya desde República Dominicana, donde vive exiliado desde hace más de un año.
Cuatro soldados con quemaduras de hasta segundo grado y al menos trece detenidos es el saldo de los enfrentamientos que se han producido el jueves en Tegucigalpa entre las fuerzas de seguridad y los manifestantes del sector de la educación, quienes habrían lanzado cócteles molotov contra los militares.
Los participantes en la protesta han quemado varios vehículos privados y patrullas policiales y han ocasionado daños en el Instituto de Previsión del Magisterio (INPREMA), donde se han refugiado. Los soldados respondieron con el uso de gases lacrimógenos y chorros de agua para dispersar la concentración, según informan medios locales.
En un principio, los docentes exigían al actual mandatario, Porfirio Lobo, que solucionara la crisis financiera del INPREMA, cesara el control del Tribunal Superior de Cuentas sobre esta institución y pagara los atrasos a más de 6.000 empleados del sector.
Sin embargo, ahora le piden también que derogue el llamado decreto de emergencia educativa, que permite la sustitución de los huelguistas, con el objetivo de no paralizar el sistema docente, algo que sus trabajadores ven como un boicot a la medida de fuerza.
La manifestación ha sido convocada por los trabajadores de la educación, aunque ha estado respaldada por el Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP), plataforma de apoyo a Zelaya, quien ejerce la oposición desde República Dominicana.
Zelaya ha afirmado en su carta que estas "agresiones" contra los maestros constituyen la "tercera parte del plan conspirativo que destruyó la democracia con el golpe de Estado del 28 de junio de 2009", en el que fue derrocado por militares y expulsado del país.
Este plan del Gobierno de Lobo "consiste en la apropiación a toda costa de los recursos naturales de la patria para inflar sus bolsas a costa de millones de pobres; para ese fin la primera misión es destruir los sectores organizados, iniciando por el magisterio nacional", alerta el mandatario depuesto.