BUDAPEST, 20 Dic. (DPA/EP) -
El primer ministro de Hungría, Viktor Orban, ha anunciado este sábado una bajada de impuestos a las empresas, una reducción fiscal que impactará en las arcas de las ciudades, que son quienes los recaudan y que además están mayoritariamente controladas por la oposición al mandatario.
"En la pandemia debemos proteger las familias y a los negocios tanto como a las vidas humanas. Para nosotros, toda vida humana y todo trabajo cuenta", ha dicho Orban en un vídeo publicado en su Facebook.
Se espera que esta acción tenga un impacto severo en alguno de los 3.000 ayuntamientos del país que dependen de los aportes fiscales como su única fuente de ingresos estable.
Orban no ha mencionado esto, pero se espera que los ayuntamientos con menos de 25.000 habitantes sean compensados por este recorte, mientras que el primer ministro ha asegurado que hablará individualmente con las grandes ciudades para ver cómo cuadrar sus cuentas.
Desde las elecciones locales de 2018, la mayoría de las principales ciudades de Hungría, incluida Budapest, están gobernadas por la oposición y la pérdida de estos ingresos podría tener un gran efecto en sus presupuestos si no es compensado de alguna manera.
El alcalde de Budapest, Gergely Karácsony, ha asegurado en Facebook que para "los gobiernos municipales, que ya estaban al borde del abismo, esta medida significa una ejecución".
"Las consecuencias sociales, económicas y políticas de esta política gubernamental son incalculables", ha apostillado.